Esta es la valoración que adelantaron a Servimedia desde el PP madrileño al conocerse que la inversión territorializada del Estado subirá en Cataluña, que recibirá 2.230, el 17,2%; mientras que bajará en Madrid, con 1.151,46 millones, el 8,9%.

En el caso de Madrid, esta cantidad que contemplan las cuentas públicas de 2022 supone una disminución de 100 millones respecto a los 1.250,28 que recibió en 2021. En palabras de la vicesecretaria de Sectorial del PP de Madrid, Ana Millán, el proyecto de PGE es directamente una “humillación para los madrileños”.

Millán explicó que en la actualidad Madrid tiene un 14% de la población española y produce el 19% del Producto Interior Bruto (PIB) de España. Con estos datos, sostuvo que no se explica cómo los madrileños reciban el 8,9% de los PGE, mientras en Cataluña las inversiones se incrementan hasta el 17,4% de la cifra total o en la Comunidad Valencia, que alcanza el 9,3%.

“Estamos ante un tiránico agravio”, deploró, al tiempo que enfatizó que la mayoría de las comunidades gobernadas por los socialistas, como Aragón, Castilla-La Mancha o las Islas Canarias, verán aumentada su partida presupuestaria.

Adujo, por tanto, que Sánchez “castiga a quienes combatimos su manera de gobernar para unos pocos” y “vuelve a arrodillarse ante sus socios comunistas, populistas e independentistas” en su estrategia de seguir “haciendo todo lo posible por permanecer en La Moncloa”.

170 EUROS POR CADA MADRILEÑO

Asimismo, la responsable del PP apuntó que la región de Madrid es la cuarta comunidad que menos inversión recibe por habitante. Indicó que cada madrileño recibirá 170 euros de los PGE, mientras que en Cataluña esa cifra alcanza los 287 euros y en la Comunidad Valenciana llega a los 239 euros por habitante.

“Sánchez es un irresponsable y lo demuestra con unos Presupuestos que promueven los desequilibrios entre las personas y premia a quien le garantice los votos. Desde el PP de Madrid le exigimos que abandone esos privilegios a sus socios que cese su incesante castigo a Madrid”, remachó.