Belarra se pronunció así en una entrevista en Antena 3 recogida por Servimedia, después de que el presidente del Partido Popular, Pablo Casado confirmara en otra en Telecinco que su formación recurrirá al TC esta ley en cuanto se apruebe, al igual que hizo con la que promulgó en el mismo sentido el Parlamento de Cataluña el año pasado.

Preguntada si esta norma morirá en los tribunales antes de aplicarse, la ministra y líder de Podemos lo denegó: “No lo creo. Cuando demos ese debate parlamentario se va a imponer el sentido común, se van a imponer los intereses de los ciudadanos y ciudadanas”, pronosticó.

Acto seguido, resaltó que esta ley que se aprobará en las próximas semanas, según fuentes gubernamentales, “es la primera que da pasos adelante en materia legislativa para cumplir con un derecho constitucional, que es el derecho a la vivienda”, porque antes “nunca se había legislado, y que nunca había habido un Gobierno valiente que se pusiera del lado de la gente”.

Conectando después con el ámbito social, Belarra se declaró “convencida de que, cuando demos ese debate en el Parlamento, lo vamos a ganar porque vamos a tener al conjunto de la ciudadanía detrás, y al movimiento del derecho a la vivienda”. Es más, pronosticó que la ley “no sólo va a ver la luz, no sólo se va a implementar, sino que estamos ante un cambio cultural; un cambio de visión de cómo entendemos la vivienda para garantizar que todo el mundo pueda acceder a una vivienda asequible, en régimen de alquiler preferentemente pero también en el conjunto del mercado”.

Antes, al PP ya le había advertido de que, si sus gobiernos autonómicos y municipales no aprovechan la posibilidad de declarar zonas tensionadas donde fijar un tope a los precios, como la ley les facultará a hacer, “va a tener que explicar a la ciudadanía por qué no va a aplicar medidas para bajar el alquiler”.

Belarra estableció, frente a los mantras de los populares, que “no hay libertad posible sin libertad material”, y acusó a ese partido de “resistirse a cualquier medida social que mejore la vida de los ciudadanos” y “proteger los intereses de quienes les han puesto ahí, las élites económicas”.