La investigación comenzó a mediados de septiembre, cuando se detectaron varios enfrentamientos entre bandas rivales en distintos puntos de la localidad. En las reyertas, resultaron heridas levemente tres personas y otras dos sufrieron lesiones graves, en uno de los casos con un corte profundo en una pierna que podría dejarle a la víctima secuelas permanentes.

Días antes, uno de los principales miembros de la banda Forty Two agredió a un joven al que confundieron con un integrante de otra banda rival, llegando a fracturarle la mandíbula.

Uno de los detenidos, de 24 años e integrante de los Trinitarios, fue detenido por la Brigada Provincial de Información en agosto del presente año como presunto autor de una agresión con arma blanca contra un miembro de los Dominican Don’t Play.

Además, este joven, considerado como el más violento y peligroso de la banda, también fue interceptado con diversas cantidades de sustancia estupefaciente, concretamente hachís, lo que les permite obtener beneficios económicos para financiar a la banda.

Por todo ello, los cuatro varones, de entre 21 y 24 años, pasaron a disposición de la autoridad judicial como presuntos responsables de los delitos de lesiones graves, amenazas y tráfico de drogas. Uno de ellos, integrante de la banda Trinitarios, ingresó en prisión tras ser puesto a disposición de la autoridad judicial.