La ministra de Trabajo y Economía Social afirmó en el acto de conmemoración del treinta aniversario de la creación del Consejo Económico y Social de España que la recuperación económica tras la pandemia “tiene como eje una solidaridad colectiva construida con la implicación de los poderes públicos y el compromiso de los agentes sociales”, a quienes agradeció su “altura de miras”.

La representante de Unidas Podemos destacó que “hemos aprendido de otras contracciones financieras que impusieron la desigualdad y precariedad como fatídica y única vía de precariedad económica”.

Así, Díaz defendió que “abordamos hoy transformaciones estructurales que con la crisis sanitaria y el despliegue de los fondos de recuperación tienen plazos y formulaciones concretas” que exigen “perspectivas transversales y nuevos lenguajes” priorizando la igualdad, los cuidados, la salud integral y la ecología, que “no son costes, sino la forma definitiva de vivir y trabajar”, por lo que sostuvo que “necesitamos una negociación colectiva teñida de verde”.

Para la vicepresidenta segunda del Gobierno, debemos “asumir con naturalidad” la relación del mundo del trabajo y la tecnología, poniendo como ejemplo la regulación del uso de algoritmos que realiza la conocida como ‘Ley Rider’.

Además, apostó por reflexionar sobre los “usos del tiempo o el derecho a la desconexión”, para avanzar hacia la “protección del bien más preciado que tenemos, nuestro propio tiempo”.

Díaz recordó que “el diálogo es un proceso, un camino”, por lo que el consenso “no solo hay que buscarlo en las soluciones y en los pactos” sino “en los caminos, en el proceso que queremos recorrer y la forma en la que queremos transitarlos”.

Así, Díaz calificó el Consejo Económico y Social de España como un “órgano vivo”, que ha participado de “los grandes debates socioeconómicos y laborales de nuestro país” y ha cumplido las funciones de “dar voz a la sociedad” y propiciar el diálogo y la deliberación, que con la presencia activa de su presidente, Antón Costas, una persona destacada por su “compromiso humano, su visión experta y su ‘sentidiño’” es “una garantía”.