Adoptada por la Comisión contra el Racismo y la Intolerancia (ECRI) del Consejo de Europa, esta resolución asegura responder al aumento “de ataques contra sinagogas y comunidades judías en muchas partes de Europa.

Según la secretaria general de ECRI, Marija Pejčinović, se trata de “una peligrosa tendencia, y todos los Gobiernos europeos deben unir sus fuerzas para combatirla”.

Esta recomendación de política general para combatir el antisemitismo apuesta por reforzar el papel de la educación y por promover los estudios sobre el Holocausto y la formación en derechos humanos.

Destaca que los actos antisemitas los cometen "un amplio abanico de autores, incluyendo neonazis y extremistas políticos y religiosos". Además, propone una serie de orientaciones globales para los Gobiernos basadas en cuatro pilares: políticas de coordinación institucional; prevención y educación; protección de las comunidades judías y sus instituciones, y enjuiciamiento y aplicación de la ley".

La ECRI animó también a los políticos, líderes de opinión y otras personalidades a "tomar una posición firme y en público contra el antisemitismo", y aconsejó a los gobiernos establecer regulaciones dirigidas a que las redes sociales, operadores de telecomunicaciones y proveedores de servicios de Internet apliquen sistemas eficaces de detección y supresión de los discursos con mensajes de odio antisemita online.