Según informó el Ministerio del Interior en un comunicado, la arrestada falsificaba los informes copiando el formato de un reconocido laboratorio, el cual al conocer el fraude lo puso en conocimiento de las autoridades. Hasta el momento los investigadores determinaron 16 falsedades documentales cometidas desde el uno de julio, no descartándose la existencia de más casos.

La investigación arrancó a mediados de agosto cuando el responsable de un laboratorio acudió a la comisaría de Centro, en Madrid, para denunciar que se estaban expidiendo certificados falsificados de prueba diagnóstica de infección activa de Covid-19 con resultado negativo. Además, estos informes figuraban a nombre de su empresa, pero carecían del requerido código QR. También, según el denunciante, los clientes accedían a dichos resultados sin haber sido examinados por personal sanitario, circunstancia que supone un peligro para la salud pública.

Los investigadores averiguaron la identidad de la presunta responsable de tales hechos, una mujer asentada en el municipio de Fuenlabrada que podría estar vinculada a una agencia de viajes. Aprovechaba esta condición para ofrecer a los clientes que acudían interesados en viajar al extranjero, la posibilidad de emitir certificados con resultado negativo por el precio de 30 euros, a sabiendas estos de su falsedad.

Finalmente se produjo el arresto de esta mujer en su domicilio, como presunta responsable de un delito de falsedad documental, y pasó a disposición de la autoridad judicial. Los agentes prosiguen con sus gestiones de investigación para la identificación de los compradores, al existir indicios de más personas implicadas en los hechos que podrían haber viajado al exterior gracias a estos informes falsos.