El nuevo dispositivo de Samsung sale a la venta juntamente con el Galaxy Z Fold3 en una clara apuesta de la compañía surcoreana por los móviles plegables. La evocación de los tiempos de móviles con tapa, con algunos míticos modelos de la firma asiática como el SGH-a800 del año 2002, es uno de los objetivos del Z Flip3, uno de los plegables más pequeños del mercado.

El dispositivo plegado tiene un tamaño de 4,2 pulgadas y 15,9 milímetros de grosor, por lo que cabe con gran facilidad en cualquier bolsillo, mientras que, cuando se abre, cuenta con una gran pantalla Infinity Flex de 6,7 pulgadas y alcanza los 6,9 milímetros de grosor, en línea con la mayoría de móviles de alta gama.

Además, una de las principales mejoras respecto al modelo original es la pantalla exterior, que crece de 1,1 pulgadas a 1,9 pulgadas y permite atender a las notificaciones que el usuario seleccione sin necesidad de abrir el dispositivo (a modo de smartwatch) e incluso previsualizar en pequeño el encuadre de la cámara externa, lo que facilita la captura de ‘selfies’ con esta lente.

Al igual que el Galaxy Z Fold3, el dispositivo cuenta con una clasificación IPX8, lo que le acredita como resistente a una hipotética inmersión en el agua. Para ambos terminales, se ha utilizado aluminio un 10% más resistente y con un cristal de protección Corning Gorilla Victus, que recubre la parte exterior de los móviles.

PANTALLA DIVIDIDA

El dispositivo permite un uso divido de la pantalla y se puede utilizar a modo de atril, de tal manera que en la parte superior se puede visualizar un vídeo mientras se responde a un mensaje o a un correo en la parte inferior. Además, esta forma de atril también puede funcionar a modo de trípode para realizar fotografías en lo que la compañía denomina ‘Modo Flex’.

Otra característica del Z Flip3, que pesa 183 gramos, es la detección dactilar, que se encuentra en un lateral del móvil. En cuanto a las cámaras, el dispositivo cuenta con dos externas de 12 megapíxeles (Gran Angular y Ultra Gran Angular) y una interior de 10 megapíxeles.

El precio del dispositivo es una de las principales novedades del nuevo modelo, ya que el Galaxy Z Flip3 sale a la venta por 1.059 euros (con 128 gigabytes de almacenamiento interno), casi un 33% menos que el Galaxy Z Flip original, lo que le sitúa en línea con otros móviles de alta gama.

El terminal incorpora tecnología 5G y cuenta con un procesador Qualcomm Snapdragon 888, superior al de su antecesor. Además, tiene una memoria RAM de 8 gigabytes, lo que permite usar varias aplicaciones al mismo tiempo sin que el rendimiento se resienta.

En cuanto al tiempo que se puede usar sin necesidad de cargarlo, la firma especifica que la capacidad de la batería del Galaxy Z Flip3 es de unos 3.300 miliamperios por hora. Asimismo, cuenta con una tasa de refresco de pantalla máxima de 120 hercios.