Coronavirus

El exceso de mortalidad en la UE cayó un 14% entre abril y junio

Madrid
SERVIMEDIA

El exceso de mortalidad en la Unión Europea se redujo hasta el 5,8% en junio, un 14% menos que en el mes de abril, cuando alcanzó el 20%. No obstante, las cifras varían mucho entre países, como lo demuestra el hecho de que en Suecia esta tasa sea del -2,3%, mientras que en Letonia se sitúa en el +20%, según los datos publicados este viernes por Eurostat.

Durante el mes de marzo de 2020, considerado oficialmente como el inicio de la pandemia, el número de muertes creció exponencialmente en algunos países de la UE alcanzándose cifras excepcionalmente altas, en comparación con la tasa de mortalidad promedio registrada entre 2016 y 2019.

La pandemia afectó a todos los países europeos, aunque su impacto no se distribuyó de manera uniforme entre ellos. En 2020, la UE experimentó dos ciclos de exceso de mortalidad: entre los meses de marzo y mayo (alcanzándose un pico del 25% en abril) y entre agosto y finales de año, con un máximo del 40% en noviembre.

En ese sentido, Italia y España fueron los países que sufrieron en los albores de la pandemia -meses de marzo y abril de 2020- la mayor carga de muertes, una situación que paulatinamente se fue extendiendo a Francia, Bélgica y los Países Bajos, hasta que se mitigó entre mayo y julio.

A finales de verano, coincidiendo con los meses de agosto y septiembre, se produjo un repunte de la mortalidad, situándose el indicador promedio en el 17,3% en octubre y fechándose el pico del 40% (el registro más alto del año) en noviembre, como preludio de un ligero descenso en diciembre (29,6%).

En aquel momento, el exceso de mortalidad aumentó en la UE, si bien los mayores incrementos se registraron en el este de Europa, con alzas del 90% en Polonia, Bulgaria y Eslovenia en noviembre.

Todo ello llevó a que a finales de 2020 se contabilizara oficialmente alrededor de 550.000 muertes adicionales en la UE, en comparación con la media del periodo 2016-2019. Sin embargo, teniendo en cuenta que entre los meses de enero y febrero del año pasado hubo un saldo negativo de óbitos, desde marzo hasta diciembre el exceso de mortalidad superó los 580.000 fallecimientos.

En 2021, se registró un nuevo pico de exceso de mortalidad en abril (20,2%) antes de un nuevo descenso al 9,6% en mayo y al 5,8% en junio.

Por su parte, la población de la UE disminuyó ligeramente en 2020, pasando de 447,3 millones a 447 millones, interrumpiéndose un largo crecimiento demográfico liderado por una migración neta positiva. En esta ocasión, el cambio natural negativo (más muertes que nacimientos) superó en número a la migración neta positiva.

A su vez, el exceso de mortalidad anual para la UE en su conjunto fue un 11,9% más alto en 2020 que la media 2016-2019, con notables diferencias entre países: Polonia, Eslovenia, Italia y España registraron tasas de alrededor del 18%, mientras que Estonia, Dinamarca y Letonia tuvieron menos del 2%.

La comparación del número de muertes en 2020 con los datos del periodo 2016-2019 puso de manifiesto la situación excepcional provocada por la pandemia. A pesar de las disparidades entre países y regiones, los dos primeros meses del año mostraron valores inferiores a los observados en los años anteriores.

El cambio de tendencia se produjo en marzo -un mes en el que tradicionalmente bajan las cifras de muertes-, cuando los fallecimientos comenzaron a aumentar drásticamente, especialmente en Italia y España.

En abril de ese año, tres países tenían más del 50% de exceso de mortalidad: España (80,5%), Bélgica (73,1%) y los Países Bajos (53,8%). Otros cuatro países superaron entonces el 35%: Italia (41,7%), Suecia (38,2%), Irlanda (37,1%) y Francia (36,4%).

Tras el verano, el aumento de muertes fue más fuerte y generalizado, con picos del 97% en Polonia, del 94% en Bulgaria, del 91,3% en Eslovenia, del 75,8% en República Checa, del 62,6% en Rumanía y del 59,2% en noviembre.

Del mismo modo, los países que en primavera registraron altas tasas de mortalidad volvieron a tenerlas en noviembre: Bélgica (58,8%), Italia (51,6%), Austria (47,8%), Malta (38,3%), Francia (31,3%) y España (24,2%).

En enero y febrero de 2021, se observó una ligera caída en el exceso de mortalidad, a la que siguió un alza más moderado que los anteriores entre marzo y abril, alcanzándose el 20% en comparación con el periodo de referencia 2016-2019. En este tercer pico, algunos países tuvieron tasas superiores al 50%: Bulgaria (75,7%), Polonia (65,2%), República Checa (61,3%), Eslovaquia (54,4%) y Hungría (50,3%). Esta situación contrastó con la de Portugal, Dinamarca, Suecia y Finlandia que no registraron ningún exceso de muertes en ese periodo.

A finales de abril y mayo la tendencia general fue de descenso, con el número de óbitos más próximo a los datos del periodo 2016-2019. En junio, la cifra de fallecimientos cayó hasta el 5,8%, en la línea de lo marcado en febrero.

Observando la evolución por países, la situación varía, con Estonia, Grecia, Croacia, Letonia, Austria, Polonia y Eslovenia marcando picos que oscilan entre el 12 y el 20%; otros, como España (4,2%), Finlandia (4,1%) o Bélgica (0,3%), con tasas moderadas; y otros como Suecia (-2,3%), Portugal (-0,4%) o Liechtenstein (-43,3), con tasas negativas.

(SERVIMEDIA)
13 Ago 2021
MST/clc