La convocatoria está dirigida a operadores de telecomunicaciones para desplegar infraestructuras de banda ancha de muy alta velocidad, capaces de prestar servicios a velocidades de, al menos, 300 megabit por segundo (Mbps), escalables a 1 gigabit por segundo (Gbps).

Se trata de la dotación anual más grande de la historia de los programas de extensión de banda ancha y cubrirá al 80% máxima la inversión, de forma que permitirá movilizar una inversión público-privada superior a 312 millones de euros. La presentación de proyectos por parte de los operadores podrá realizarse hasta el próximo 10 de septiembre.

Esta convocatoria incluye 52 lotes o zonas de concurrencia, coincidentes con otras tantas provincias y ciudades autónomas, al igual que el anterior Programa de Extensión de Banda Ancha (Pebanga).

A diferencia de aquel programa, el Ministerio indicó que ahora se ha incrementado la granularidad en la selección de las zonas elegibles al pasar de población a parcelas de catastro. Su objetivo es desarrollar proyectos que permitan extender la cobertura, como mínimo, a 316.500 unidades inmobiliarias, sean hogares o empresas.

La mayoría de ellas (265.240) deberán estar ubicadas en zonas blancas o sin cobertura de redes de velocidad de, al menos, 30 Mbps, ni planes para su dotación en los próximos tres años. El resto estarán ubicadas en zonas grises o aquellas que solo disponen de cobertura de banda ancha de nueva generación o de previsiones para su dotación en el plazo de 3 años por parte de un solo operador.

El programa lanzado este lunes forma parte de las medidas para acelerar la transformación digital contenidas en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia con el objetivo de ampliar la cobertura de banda ancha al 100% de la población. El Plan tiene prevista una inversión de 4.000 millones de euros para extender la conectividad, acelerar el despliegue de redes 5G e impulsar un ecosistema de ciberseguridad.

Con el programa Unico (Universalización de Infraestructuras Digitales para la Cohesión)-Banda Ancha se da continuidad además a los trabajos impulsados por el anterior programa y con el que se alcanzó que el 87% de la población española tuviera cobertura de infraestructuras digitales que permiten velocidades de, al menos, 100 Mpbs, ya el pasado año.