La empresa destaca que su producto también cuenta con el distintivo el ‘Ángel Azul’, certificado expedido por el Ministerio de Medio Ambiente alemán y que acredita que sus bolsas son realmente de plástico 100% reciclado, y con el sello FSC, que certifica la sostenibilidad de la caja de cartón en la que se venden las bolsas.

Según Álvaro Salmerón, cofundador de la compañía, “en España se utilizan 250 millones de kilos de plástico virgen al año en forma de bolsas de basura; representa el peso de unas 25 Torre Eiffel. Es un reto convertir todo ese consumo en bolsas Relevo 100% recicladas, que además pueden volver a reciclarse”.

Salmerón subraya los beneficios ambientales que entraña trabajar con materiales reciclados, ya que “evita la contaminación producida por el plástico virgen”. Por ello, colaboran con ciudades como Málaga para la recogida de residuos municipales. Según sus estimaciones, más de 200.000 toneladas de plástico virgen en forma de bolsa de basura son consumidas por la administración pública.

Además, pone en valor la capacidad del reciclaje para crear empleo, puesto que “mientras que la producción de plástico virgen está muy automatizada, el reciclado requiere separar, limpiar y transformar el material".