Para ello, la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, está ya en negociaciones con Unidas Podemos para que, a la vuelta de vacaciones, se pueda iniciar la ronda de contactos con el resto de las formaciones políticas que puedan apoyar las cuentas públicas.

A la vez está recibiendo las peticiones de los ministerios y haciendo la criba entre las necesidades de cada departamento y el encaje de todas ellas en el proyecto presupuestario.

Fuentes gubernamentales admiten que en esa negociación con Unidas Podemos se debe cerrar el acuerdo que permita poner en marcha la ley de Vivienda que se acordó en la negociación de los vigentes Presupuestos y que acumula siete meses de retraso, porque de seguir así no habrá ley de Vivienda y éste se considera un tema capital en la coalición.

Además, en la parte socialista del Ejecutivo son conscientes de que Unidas Podemos va a presionar sobre este asunto y consideran que en septiembre debe cerrarse un acuerdo para esta norma que ahora mismo está bloqueada, principalmente, por la diferencia de unos y otros a la hora de regular los precios del alquiler en las llamadas zonas tensionadas.

Con este horizonte, Montero prevé tener este jueves una nueva reunión -ya tuvo una este lunes- con el secretario de Estado de Derechos Sociales y encargado en UP de negociar los temas presupuestarios, Nacho Álvarez, para ir concretando el proyecto de ley que la titular de Hacienda quiere cerrar antes con su socio de manera que, a la vuelta de verano, pueda iniciar la ronda de contactos con los demás partidos políticos.

Precisamente, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en la que compareció para explicar el ‘techo de gasto’, Montero afirmó que estas cuentas “realmente merecen la pena” y va intentar contar ”con todo el mundo” y sumar “cuántos más grupos políticos, mejor”.

Ello le llevó a recordar que el año pasado, fruto también de la fragmentación parlamentaria, se aprobaron los Presupuestos que más partidos políticos han respaldo en la historia. “Esa es mi idea, hablar con todos, prioritariamente con los que han mostrado su compromiso con políticas progresistas y que han estado apoyando cuentas públicas otros años”, reconoció.

No obstante, también se dirigió a los que “ni siquiera las leen y adoptan decisiones previas de no a todo” para que piensen en "el futuro de este país”, que con estos Presupuestos debe ser “capaz de consolidar esta recuperación económica”, y les pidió, dirigiéndose al Partido Popular sin mencionarlo, que hagan el “esfuerzo” que han hecho ciudadanos, empresas y administraciones para supera la situación de la pandemia que todavía da coletazos en la sociedad española.

Por otra parte, la ministra reconoció que espera “revalidar la alianza” que cerró el año pasado con ERC para que apoyaran los Presupuestos y que se “sume” Junts a esa ecuación porque las cuentas públicas son “revitalizadoras” para Cataluña y eso se debe ver en el “diálogo" iniciado ahora con el nuevo consejero catalán de Economía, Jauma Giró, que pertenece a la cuota de Junts en el Ejecutivo que lidera Pere Aragonès (ERC).

La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, destacó lo extraordinario que supone hablar de normalidad por estar proyectando los PGE para 2021 en tiempo y forma, aspecto que en los últimos años no ocurría, aunque el Ejecutivo consiguió el pasado ejercicio lograr la aprobación a tiempo para que entraran en vigor el 1 de enero de 2021.

En el Ejecutivo no conciben que no se llegue al mismo escenario que el año pasado y logren un acuerdo presupuestario que dé estabilidad al escenario de recuperación económica y social tras la pandemia.