Economía

El FMI baja del 6,4 al 6,2% la previsión de crecimiento para España este año y la sube al 5,8% para 2022

-Alerta sobre las brechas de crecimiento entre economías desarrolladas y emergentes y pide ayudar a vacunar a los países pobres porque “la recuperación no está asegurada hasta que la pandemia sea repelida a nivel mundial"

MADRID
SERVIMEDIA

El Fondo Monetario Internacional (FMI) cree que el PIB español crecerá este año un 6,2%, por debajo del 6,4% que auguraba en abril pasado, aunque se mantiene a la cabeza de la recuperación entre las economías avanzadas, y mejora del 4,7% al 5,8% su proyección de expansión para 2022.

Sus previsiones forman parte del ‘World Economic Outlook’ publicado este martes por el organismo, donde mantiene casi invariables las previsiones a escala mundial, pero alerta de un desfase creciente entre la mejora en los países desarrollados y un retraso en la recuperación de los emergentes por la dispar evolución en el proceso de vacunación.

Conforme a sus estimaciones, la economía mundial crecerá un 6% este año como había previsto en abril y mejora del 4,4 al 4,9% su previsión para el siguiente ejercicio. Dicha mejora se centra en las economías avanzadas cuya progresión será del 5,6% y 4,4%; inferior aún al 6,3 y 5,2% estimado para el bienio en los mercados emergentes; pero donde rebaja sus proyecciones.

Con los nuevos cálculos, España tendrá un crecimiento dos décimas inferior al previsto este año y lo mejora en nueve décimas para el 2022. La expansión del 6,2% prevista para este año es inferior al 7% estimado para Estados Unidos y Reino Unido o el 6,3% de Canadá, pero supera la previsión para Alemania (+3,6%), Francia (+5,8%), Italia (+4,9%) o Japón (+2,8) dentro de las economías avanzadas.

Para el 2022 y con una proyección de crecimiento del 5,8%, España lideraría el crecimiento entre las economías desarrolladas, por encima de Estados Unidos (+4,9%), Reino Unido (+4,8%), Canadá (+4,5%) y el área euro (+4,3%). Aquí prevé un avance del 4,1% en el PIB de Alemania y del 4,2% en Francia e Italia.

RIESGO DE GENERAR BRECHAS

El FMI estima en su informe que la pandemia ha reducido los ingresos per cápita en las economías avanzadas en un 2,8% en relación con las tendencias que hubiesen sido normales en el trienio 2020-2022 sin Covid, mientras que la pérdida será del 6,3% anual para las economías de mercados emergentes y en desarrollo (excluyendo China).

La revisión de sus proyecciones explica que responde a las diferencias en los desarrollos pandémicos con la variante delta del Covid y cuando cerca del 40% de la población ha sido completamente vacunada en los países avanzados frente a solo el 11% en los mercados emergentes y con una pequeña fracción en los países de bajos ingresos. El avance de la vacunación está permitiendo la reactivación, mientras que la quinta oleada de la pandemia limita el crecimiento en los países con menos recursos.

Un segundo factor que apunta que influye en el crecimiento son las políticas de apoyo, que en las economías avanzadas ha movilizado 4,6 billones de dólares para el 2021 y años siguientes, destacando ahí las iniciativas de Estados Unidos y el NextGeneration UE europeo, mientras que en las economías de mercados emergentes y en desarrollo “la mayoría de las medidas expiraron en 2020 y están buscando reconstruir los colchones fiscales”.

Entre los riesgos el FMI apunta las preocupaciones por la inflación que, si bien, cree que será transitoria porque compara con un 2020 de precios anormalmente bajos, por ejemplo, en viajes y hostelería o materias primas y con tasas de empleo aún inferiores a los niveles prepandémicos, reconoce que están sujetas a una incertidumbre significativa “dada la inexplorada naturaleza de esta recuperación”.

A juicio del FMI, un acceso más generalizado a las vacunas “podría mejorar las perspectivas”, pero admite también la incertidumbre sobre potenciales apariciones de variantes de virus altamente infecciosos que “podría descarrilar la recuperación y eliminar acumulativamente 4,5 billones de dólares del PIB mundial para 2025”.

Para hacerle frente juzga “necesaria una acción multilateral para garantizar un acceso rápido y mundial a las vacunas”, que “salvaría innumerables vidas, evitaría la aparición de nuevas variantes, y sumaría billones de dólares al crecimiento económico mundial”.

Al respecto recuerda la reciente propuesta del personal técnico del FMI, respaldada por la Organización Mundial de la Salud, el Banco Mundial y el Organización de Comercio, de fijarse el objetivo de vacunar, al menos, al 40% de la población en todos los países para fines de 2021 y, al menos, el 60% para mediados de 2022, junto con asegurando diagnósticos y terapéuticos adecuados y cuya inversión ascendería a unos 50.000 millones de dólares. “Para lograr estos objetivos, al menos 1.000 millones de dosis de vacuna deben ser compartidas en 2021 por los países con excedentes de vacunas y los fabricantes de vacunas deben priorizar las entregas a países de bajos y medios ingresos”, refiere su informe.

También reclama que se mantenga el acceso a la liquidez a las economías con limitaciones financieras, y reducir las emisiones de carbono para frenar el aumento de temperaturas globales a fin de “evitar consecuencias sanitarias y económicas catastróficas”.

“La recuperación no está asegurada hasta que la pandemia sea repelida a nivel mundial. Las acciones políticas concertadas y bien dirigidas a nivel multilateral y nacional pueden marcar la diferencia entre un futuro en el que todas las economías experimenten recuperaciones duraderas o uno en el que las divergencias se intensifican, los pobres se vuelven más pobres y el malestar social y las tensiones geopolíticas crezcan”, augura el FMI.

(SERVIMEDIA)
27 Jul 2021
ECR/gja