Según informó hoy la Dirección General de la Policía y de la Guardia Civil, han sido detenidas tres personas a las que se les imputa un delito de tenencia y depósito de armas. Además han sido intervenidas placas falsas de Policía Nacional y Guardia Civil, entre otros efectos.

La investigación se inició hace varios meses cuando agentes de esta localidad tuvieron conocimiento de la existencia de zulos donde se encontraban armas cortas y largas.

A primera hora de la mañana de ayer viernes fue localizado un primer zulo, en unos pinares a 10 kilómetros del domicilio de uno de los detenidos. En este hoyo se intervinieron un revólver, cuatro pistolas, cuatro armas largas (entre ellas un fusil de asalto), puños americanos, sprays de defensa, pistolas eléctricas, defensas extensibles, básculas de las usadas para el pesaje de sustancias estupefacientes y nueve bolsas con abundante munición de arma corta y larga. Además se halló una granada y pólvora en grano, que fue manipulada por los agentes de Explosivos de la Comisaría Provincial de Valladolid.

Una vez practicadas las correspondientes detenciones, se procedió al registro domiciliario del que se considera el gestor de las armas, F.T.S., incautándole en su casa dos pistolas y un revólver. Por la extensión de la finca se hizo necesaria la intervención de la Unidad de Guías Caninos. F.T.S. está pendiente de extradición a la Repúblicana Dominicana ya que, según una investigación llevada desde allí, podría ser el presunto responsable de encargar el asesinato de un hombre a través de un sicario de ese país, tras haber descubierto que su pareja mantuvo relaciones con el fallecido durante una estancia que tuvo en ese país.

El segundo zulo fue localizado en la tarde de ayer. La mercancía estaba alojada en un bidón dentro de la tierra, en el que había chalecos antibalas, chalecos simulando a los de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, placas falsas de la Policía Nacional y de la Guardia Civil, abundante munición de armas cortas y largas, numerosas fundas de pistolas, defensas eléctricas y una pistola del calibre 45.

Los agentes volvieron a hacer un análisis de toda la información recabada durante la investigación y llegaron a la conclusión de que podría existir un tercer zulo en las inmediaciones del segundo.

De este modo, se decidió volver a la zona en la mañana de hoy sábado, y así se encontró otro bidón enterrado en el suelo con abundante munición para armas cortas y largas, dos escopetas de balines y prensas para preparar sustancias estupefacientes.