Según explicó el ministerio, tal y como establece la normativa europea, las ayudas van dirigidas a las zonas blancas –aquellas que no disponen de cobertura de redes de velocidad de al menos 30 Mbps, ni planes para su dotación en los próximos tres años–, y a las grises –aquellas que, aun teniendo cobertura o previsiones de cobertura de muy alta velocidad en los próximos tres años, es proporcionada por un solo operador y la velocidad es inferior a 100 Mbps. En concreto, han sido identificadas un total de 222.691 zonas blancas, con 1.326.349 unidades inmobiliarias, y 35.455 zonas grises, con 257.255 unidades inmobiliarias.

Por provincias, aquellas donde han sido identificadas más zonas elegibles son Valencia (18.471), Alicante (17.974), Asturias (14.251), Lugo (12.859), y Murcia (10.883).

La identificación de las zonas elegibles comenzó a partir de la cobertura georreferenciada facilitada por más de 250 operadores y, posteriormente, ese listado preliminar de zonas elegibles se sometió a consulta pública el pasado mes de mayo.

A este respecto el ministerio indicó que fueron recibidas más de 200 aportaciones procedentes de administraciones públicas autonómicas y locales, operadores de telecomunicaciones y otros agentes.

Una vez identificadas las zonas elegibles, el ministerio explicó que en las próximas semanas se publicará la primera convocatoria del Programa Unico-Banda Ancha para la extensión de la banda ancha con una dotación de 250 millones de euros.

El Plan para la Conectividad y las Infraestructuras Digitales, cuenta con 2.000 millones de euros para la extensión de la conectividad digital en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y tiene como objetivo que el 100% de la población tenga acceso a redes de nueva generación de velocidad ultra rápida en el año 2025.