El precio del resto de tipologias de vivienda también creció, pero a cotas inferiores. Por ejemplo, los de dos dormitorios subieron un 12,2% y los de tres un 11,5%. Por su parte, el de los chalets aumentó un 9,3%, mientras que los pisos de 4 o más dormitorios lo hicieron en un 7,8%. Todos estos crecimientos provocaron un incremento promedio del 10% en el precio de la vivienda española durante este periodo de tiempo.
En Madrid y Barcelona también registraron aumentos. Así, en la capital de España experimentó subidas en casi todas las tipologías: los estudios se encarecieron un 4,2%, los apartamentos de 1 dormitorio un 0,5%; los pisos de 2 habitaciones subieron un 0,8%, los de 4 o más un 4,7%, y los chalets un 3,6%. Por otro lado, los pisos de tres habitaciones son los únicos que se han abaratado este año cayendo un 1,4%.
Respecto a la ciudad de Barcelona, los estudios han sido las únicas viviendas que aumentaron su precio, con un 14,4%, mientras que el resto de categorías experimentaron descensos. En los pisos de 1 habitación el precio cayó, en concreto, un 5,6%; similar al 5,5% de descenso experimentado por las viviendas de 2 habitaciones, y superior al 4,4% de caída en las viviendas de 3 habitaciones, y 3,1% en los de 4 o más. En los chalets el precio se redujo a su vez un 3,8%.
Sin embargo, en la provincia de Barcelona crecieron los precios en todas sus dimensiones: los estudios se encarecieron un 9,9%, los pisos de una habitación un 14,6%, los de dos un 6,6%, los de tres un 4,8%, los de 4 o más 8,2% y los chalets 6,8%.
Por otra parte, el informe de Idealista destaca la subida del precio de los chalets en Málaga, que sufrió un incremento del 113,5%, mientras en el otro lado de la balanza se encuentra Soria, con un descenso del 16,9%.
También subrayó el aumento del precio de los estudios en Tenerife, que es del 26,9%, y la bajada del precio de los mismos en Guadalajara del 24,1%.