Junto a España, el Ecofin ha dado el visado final también a los planes nacionales de recuperación de Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, Eslovaquia, Francia, Grecia, Italia, Letonia, Luxemburgo y Portugal, lo que supone el pistoletazo para que puedan recibir fondos de recuperación y resiliencia de la UE para impulsar sus economías y recuperarse de las consecuencias de la Covid-19.

Su aprobación, que tiene lugar después de que la Comisión Europea analizase y validase los planes nacionales, implica que los Estados miembros pueden firmar ya los acuerdos de subvención y de préstamo que permiten una prefinanciación de hasta el 13%, que en el caso de España corresponde a los primeros 9.000 millones.

Según ha detallado el Ecofin, los doce países con planes aprobados han solicitado ya de hecho la prefinanciación de los fondos asignados y a partir de ahora podrán celebrar acuerdos de subvención y de préstamo con la Comisión Europea y comenzar a recibir fondos que les permitan ejecutar sus planes nacionales.

La ayuda financiera de la UE procede del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia o elemento principal del NextGeneration UE, dotado con 672.500 millones de euros para ayudar a impulsar la recuperación económica de Europa apoyando las reformas y proyectos de inversión de los países. Para ello, las medidas aprobadas en los planes nacionales se centran en varios ámbitos de actuación o pilares: la transición ecológica; la transformación digital; el crecimiento inteligente, sostenible e integrador; y la cohesión social y territorial.

El plan español apela, en concreto, a 65.000 millones de euros en subvenciones de los 140.000 millones a los que el país puede llegar a recibir con cargo al macrofondo NexGeneration UE vía transferencias y créditos. La intención del Gobierno es recibir el 80% de esos 65.000 millones en el trienio 2021-2023 para acelerar la recuperación y modernización de la economía, aunque la ejecución de los planes de inversión y reformas contenidos en el Plan y que lo harán posible tendrá lugar hasta el ejercicio 2026.

Tras la recibir la citada prefinanciación de 9.000 millones, se pondrá en marcha un mecanismo por el que el Gobierno irá solicitando a la Bruselas que vaya desbloqueando nuevos pagos con la presentación cada semestre de retos e hitos cumplidos de los comprometidos en el Plan de Recuperación.

El Gobierno confía que este mismo año lleguen otros 10.000 millones en la segunda parte del ejercicio, con la presentación de un centenar de proyectos y objetivos ya formalizados. Entre otros podría referir planes ya aprobados como la hoja de ruta del hidrógeno renovable, la Agenda España Digital 2025, el Ingreso Mínimo Vital, la regulación del teletrabajo, la Ley Orgánica de Educación o la Ley de Cambio Climático.

ABONOS POR SEMESTRES

Luego habrá otros dos desembolsos cada año por valor de 18.000 millones de euros en 2022 y 17.000 millones 2023, de forma que el 80% de las transferencias se encuentran previstas para ese trienio. Quedarían para los ejercicios 2024 otros 8.000 millones, casi 3.476 millones para el 2025 y 4.00 millones adicionales en el 2026.

La intención declarada por el Gobierno es avanzar en paralelo otros proyectos para optar a los casi 70.000 millones restantes previstos para España, aunque ya en forma de créditos con cargo al fondo europeo y no transferencias.

El Gobierno espera que las inversiones y reformas comprometidas en dicha hoja de ruta o Plan de Recuperación añadan entre dos y tres puntos adicionales al PIB en el trienio 2021-23, y permitan generar 800.000 empleos hasta el 2023. Su previsión es que el próximo año la economía recupere el nivel del PIB que tenía antes de estallar la crisis de la pandemia y en 2023 se haya restablecido el ritmo de expansión preCovid de la economía, elevando el crecimiento potencial a medio plazo por encima del 2%.