Consumo

Europa refuerza la seguridad de los productos y revisa las ofertas de créditos al consumo para que el usuario “entienda lo que firma”

MADRID
SERVIMEDIA

La Comisión Europea presentó este miércoles la revisión de dos conjuntos de normas de la UE que persiguen mejorar los derechos de los consumidores y con la que refuerza la red de seguridad para los usuarios de la UE velando por que los productos peligrosos se retiren del mercado y por que las ofertas de crédito se presenten a los consumidores de forma “clara y fácil de leer” en dispositivos digitales para que aquellos “entiendan lo que firman”.

Así lo precisó la Comisión en un comunicado en el que subrayó que la propuesta “actualiza” tanto la Directiva relativa a la seguridad general de los productos vigente como las normas de la UE en materia de crédito al consumo para proteger a los consumidores.
Tras puntualizar que las ventas en línea se han incrementado de forma continua a lo largo de los últimos veinte años y que en 2020 el 71 % de los consumidores compró en Internet, “a menudo” nuevos productos tecnológicos, la Comisión hizo hincapié en que el Reglamento relativo a la seguridad general de los productos hará frente a los “riesgos” relacionados con esos nuevos productos tecnológicos y con las compras en línea mediante la introducción de normas de seguridad de los productos para estos mercados.
Así, garantizará que sean seguros todos los productos que lleguen a los consumidores de la UE, “a través de mercados en línea o comprados en la tienda de la esquina, procedan o no de la UE”, sentenció la Comisión, que defendió que el nuevo reglamento hará que todos los mercados “se atengan a sus obligaciones, de manera que los consumidores no acaben teniendo productos peligrosos”.
La actual Directiva relativa a la seguridad general de los productos, vigente desde 2001, vela por que solo se vendan productos seguros en el mercado único de la UE. Sin embargo, a juicio de la Comisión, siguen circulando “demasiados productos inseguros” en dicho mercado, lo que, lamentó, “da lugar a unas condiciones de competencia no equitativas” para las empresas y a un “alto coste para la sociedad y los consumidores”.
CRÉDITO AL CONSUMO
Por su parte, la revisión de la Directiva relativa al crédito al consumo dispone que la información acerca de los créditos se presente “de forma clara y adaptada” a los dispositivos digitales, de modo que los consumidores “entiendan lo que firmen”.
Además, la directiva “mejorará” las normas relativas a la evaluación de la solvencia, esto es, si un consumidor “será capaz o no de reembolsar el crédito, a fin de prevenir el problema del sobreendeudamiento”, según la Comisión.

La normativa también “exigirá” a los Estados miembro el fomento de la educación financiera y que velen por que los consumidores tengan asesoramiento en materia de endeudamiento.
La Directiva 2008/48/CE relativa a los contratos de crédito al consumo estableció normas armonizadas de la UE sobre el crédito al consumo y articuló un marco “sólido”, según la Comisión, para un acceso “equitativo” de los consumidores europeos al crédito. Sin embargo, insistió en que, desde su entrada en vigor, la digitalización ha cambiado “profundamente” las costumbres de los consumidores y la manera en que toman sus decisiones y, por ello, la revisión presentada este miércoles tiene por objeto “tener en cuenta estas novedades”.
Ambas propuestas forman parte de la Nueva Agenda del Consumidor, puesta en marcha a finales del año pasado, cuyo objetivo es actualizar el marco estratégico general de la política de la UE en materia de consumo y, una vez presentada esta revisión, el Consejo y el Parlamento debatirán a partir de ahora dichas propuestas.
La vicepresidenta responsable de Valores y Transparencia, Věra Jourová, defendió la necesidad de “reforzar” así la protección de los consumidores ayudándoles a “evitar riesgos” relacionados con el crédito y aplicando normas “aún más estrictas” en materia de seguridad de los productos. “También impondremos una mayor responsabilidad a los participantes en el mercado y dificultaremos que se escondan detrás de una jerga jurídica complicada”, apostilló.
En la misma línea, el comisario de Justicia, Didier Reynders, admitió que, en el actual contexto, es “deber” de la Comisión “proteger” a los consumidores, “sobre todo a los más vulnerables”. “Es para lo que sirve exactamente nuestra revisión de las normas vigentes de la UE sobre el crédito al consumo y la seguridad general de los productos”, resolvió.

(SERVIMEDIA)
30 Jun 2021
MJR/gja