Así lo reclamó en un comunicado en el que puntualizó que la medida anunciada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ya fue solicitada por OCU el pasado 6 de mayo, al considerar que en este momento de la pandemia la obligatoriedad de llevarla al aire libre allí donde sea posible mantener la distancia de seguridad resulta “innecesaria y poco eficaz” a la luz de la evidencia científica y “en línea” con las recomendaciones de la OMS.

Además de considerarla como una medida “innecesaria”, OCU destacó que el mantenimiento de la obligatoriedad “constante” supone un desembolso económico “importante” para las familias más vulnerables y causa “fatiga” en los ciudadanos con un resultado, a su juicio, “contraproducente” para el control de la expansión del virus.

En este punto reiteró la relevancia de mantener las medidas de protección en el interior de espacios públicos compartidos “de cualquier naturaleza” y “especialmente” en aquellos en los que se puede producir “aglomeración o hacinamiento”, donde urgió a controlar los aforos, garantizar la adecuada ventilación y “obligando, ahí sí”, al uso de este elemento de protección.

Asimismo, consideró necesario “focalizar” las recomendaciones a la población en relación con los aforos, determinados por criterios “homogéneos y fundamentados” y que, a su entender, deberían acompañarse, además, por directrices “claras” sobre la salubridad del ambiente interior.