Según informaron este viernes ambos cuerpos policiales, en el marco de esta operación se ha detenido a 10 personas (cuatro en Palma de Mallorca, una en Valencia, tres en Córdoba y dos en La Coruña), a las que se les investiga por delitos de tráfico ilícito de vehículos.

La banda estaba liderada por varios ciudadanos de origen italiano, francés y español y se ramificaba en diferentes lugares del territorio nacional. Los encausados sustraían los vehículos y luego sustituía sus elementos identificativos (matrícula y número de bastidor) y documentación con otros de turismos similares procedentes de siniestros.

Se han llevado a cabo 17 registros domiciliarios en las provincias de Alicante, Badajoz, Baleares, Córdoba, La Coruña y Valencia. Además, se han intervenido un total de 63 vehículos, muchos de ellos de alta gama, que se están analizando para confirmar si fueron sustraídos y su procedencia.

INMENSO TALLER

También se ha interceptado 45 pares de placas de matrícula, abundante documentación de vehículos de diversos países, principalmente Alemania e Italia, así como fichas técnicas y permisos de circulación manipulados.

Otros elementos encontrados a la trama son aparatos técnicos para llevar a cabo los robos (detectores de radiofrecuencia, maquinaria para forzar bombines, etc.), numerosos equipos informáticos, 14.800 euros en efectivo, un arma de fuego y munición.

La trama contaba en Palma de Mallorca con un inmenso taller situado en una nave industrial, que usaban para desmontar los vehículos y llevar a cabo el cambio de los elementos identificativos, así como del resto de las piezas mecánicas necesarias de cada coche. En el interior la nave había un total de 32 vehículos en diversas fases de montaje para su posterior venta, así como numerosos motores y recambios.

Por otro lado, se han bloqueado 14 sociedades mercantiles usadas en el entramado para desarrollar la actividad criminal, nueve viviendas y dos naves industriales, así como otros productos bancarios.