Lo dijo durante la visita que efectuó junto con la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, al proyecto ‘Konsulta’m’, un espacio de servicio de apoyo psicológico dirigido a adolescentes y jóvenes para detectar y atender de forma preventiva sus problemas de salud mental.

Ione Belarra explicó que este plan nacional permitirá “conocer en profundidad” la realidad de la salud mental de los menores y los jóvenes españoles, ante la necesidad de disponer de datos cuantitativos y cualitativos sobre cómo este segmento de la población está viviendo “experiencias de sufrimiento, de tristeza, de ansiedad que nos revelan los profesionales”.

La ministra consideró necesario conocer con exactitud cuál ha sido el impacto que ha tenido sobre ellos el “discurso de la criminalización”, a pesar del “esfuerzo enorme” que han realizado “quedándose en casa para protegernos a todos”.

Expuso que el plan tendrá un enfoque “netamente participativo”, ya que “no podemos hacer un plan de diagnóstico si no contamos con la voz de los niños, las niñas y la gente joven”. Además, añadió Belarra, esta iniciativa tendrá que aunar “esas situaciones específicas que se lo ponen aún más difícil”, como “pertenecer al colectivo Lgtbi, ser una niña o una chica joven, ser una persona racializada o no privilegiada”.

Por otro lado, la ministra alertó de que en España “se están produciendo situaciones en las que nuestros niños y niñas y nuestros jóvenes no están recibiendo el apoyo necesario ante situaciones difíciles para poder salir adelante”.

En ese sentido, señaló que este otoño se ha producido un incremento de las urgencias psiquiátricas, en forma de intentos de suicidio, trastornos de alimentación y ansiedad, entre jóvenes y menores, así como un aumento de las autolesiones.