Crimen organizado

Un chivatazo permite intervenir 132 kilos de marihuana a unos narcos alemanes

MADRID
SERVIMEDIA

Correos electrónicos anónimos enviados a la Policía Nacional han permitido intervenir 132 kilogramos de cogollos de marihuana a una banda de narcotraficantes de Alemania, que tenía bases en Madrid y Toledo para traficar con este estupefaciente.

Según informó este lunes la Policía, una operación conjunta con Alemania ha permitido detener en este país a los cabecillas de la trama, mientras que en España se ha localizado la partida de marihuana.

El alijo encontrado en territorio español, de alta calidad y pureza, estaba escondido en un palé de grandes dimensiones en el interior de 12 cajas de cartón, que la banda controlaba en todo momento gracias a dos dispositivos de seguimiento.

La investigación comenzó en 2019, al conocerse la existencia de varias organizaciones criminales asentadas en España que traficaban con importantes cantidades de sustancias estupefacientes con destino Europa. Además, gracias a los canales de colaboración ciudadana con los que cuenta la Policía Nacional, se recibieron varios correos anónimos que denunciaban que un grupo de narcotraficantes, asentado en Toledo y Madrid, adquiría grandes partidas de hachís y marihuana, para su posterior distribución y venta en otros países europeos.

EMPRESAS DE TRANSPORTE

En estos correos informaban a los agentes de que para distribuir la droga los integrantes de la banda utilizaban empresas de transporte internacional, a través de las cuales enviaban el estupefaciente oculto entre carga legal o mudanzas.

Con toda esta información, los agentes comenzaron a realizar un control exhaustivo de las empresas que operaban en las dos provincias donde se encontraban ubicados los investigados para corroborar cuales eras las que podían estar realizando los envíos fraudulentos.

Al mismo tiempo, recibieron una comunicación anónima determinante para la investigación, en la que se señalaba la inminencia de un importante envío de marihuana con destino Alemania. Una vez que el ciudadano les facilitó los datos concretos que conocía, se organizó un dispositivo de vigilancia y control de las empresas de transporte que los investigadores consideraban que pudieran ser utilizadas para envío de la droga.

Al mismo tiempo los investigadores establecieron comunicación con las autoridades policiales alemanas a través del oficial de enlace de la BKA Bundeskriminalamt y supieron que ya conocían la existencia de la organización en su territorio y tenían una investigación abierta para su desarticulación.

(SERVIMEDIA)
07 Jun 2021
NBC/gja