Según un comunicado divulgado este viernes por la organización, Microsoft estaba obligado a incluir Skype Out en el Registro de Operadores, ya que, cuando se puso en marcha, se trataba de un servicio de comunicaciones electrónicas disponible al público en general.

Esta aplicación permite realizar llamadas hacia las redes telefónicas, aunque no recibirlas, ya que no utiliza una numeración atribuida en el Plan Nacional de Numeración Telefónica (PNNT).

Por ello, la CNMC considera que, acorde a la regulación española, Microsoft contaba con la obligación de registrar el servicio bajo la denominación de “servicio telefónico sobre redes de datos con interoperabilidad con el servicio telefónico disponible al público”.

En este sentido, desde el organismo han confirmado que Microsoft Ireland no constaba inscrito en el Registro de Operadores para la prestación del servicio “Skype a teléfono”, sino para la prestación de otros servicios de comunicaciones electrónicas. En concreto, para la reventa de servicios vocales nómadas y telefonía vocal en grupo cerrado de usuarios.

Esto supone una infracción “muy grave” contra la Ley General de Telecomunicaciones. La sanción final se ha reducido hasta los 7.200 euros, ya que se ha aplicado una reducción del 40% por pago previo y reconocimiento expreso de responsabilidad.

Microsoft todavía puede interponer recurso contencioso-administrativo ante la Audiencia Nacional en un plazo de 2 meses desde la notificación.