Industria
La industria alimentaria española redujo su facturación un 5,3% en 2020 y espera crecer este año un 3%
-El Gobierno no cuenta con recuperar hasta 2022 las cifras prepandemia del sector
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La industria española de alimentación y bebidas facturó el año pasado 129.854 millones de euros, lo que supone un 5,3% menos que en 2019.
Así lo recoge el último informe anual sobre el principal sector industrial de la economía española, que este martes presentó en rueda de prensa el director general de la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB), junto al secretario general del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, Fernando Miranda.
FIAB esperaba batir en 2020 un nuevo récord en la cifra de negocio y alcanzar los 140.000 millones de euros, pero la pandemia frustró el objetivo de este sector, que representa el 2,4% del valor de la economía nacional.
Pese a que el consumo en el hogar aumentó un 18% por el confinamiento, el cierre de la hostelería y el turismo, más decisivos que la distribución en el balance total, fueron determinantes en la caída de la facturación, y el valor añadido bruto del sector se dejó un 8,6% interanual, hasta los 24.500 millones de euros.
Las cifras del sector reflejan que el coronavirus se llevó por delante un 1,1% del empleo en esta industria, con 4.900 trabajadores menos a cierre de 2020, que se saldó con 421.800 afiliados a la Seguridad Social.
Por productos, pan y pastas sufrieron las mayores caídas en las cifras de negocio, seguidos de aceite y grasas, con un 8%. Los mejores comportamientos los tuvieron pescado, productos lácteos y molinería y sector cárnico.
“RESILIENCIA”
Pese a los datos negativos, FIAB y el Gobierno destacan el mejor comportamiento de este sector en 2020 que otras industrias. “Fue un año muy difícil, pero el sector ha demostrado su resiliencia”, dijo el alto cargo de Agricultura.
La caída fue menos acusada que en otros sectores en gran medida gracias a las exportaciones, que crecieron un 4,4% y alcanzaron los 33.000 millones de euros. Por países, China disparó su demanda un 77%, sobre todo por su crisis de peste porcina. Francia, Marruecos y Reino Unido, en este último caso por el acaparamiento ante la llegada del Brexit, también figuraron entre los países con mejores ventas de la industria española. En el lado contrario se situaron Portugal, Italia y Japón, con descensos en la demanda de entre el 2 y el 9%.
Para este 2021, el director de FIAB quiso ser cauto en los pronósticos de cifras y afirmó que el segundo semestre va a ser fundamental en el balance del año dependiendo de la llegada de turistas y de la reapertura de la hostelería según la evolución de la pandemia. Pero si todo marcha según lo previsto, apuntó García de Quevedo, esperan un crecimiento de entre el 2 y el 3% respecto a 2020, por encima del 5 o 6% aventurado para el conjunto de la economía.
El secretario general del Ministerio de Agricultura dijo que la previsión del Ejecutivo es que “en el bienio 2022-2023” se recuperen los niveles de facturación cercanos a los 140.000 millones que se rozaron en 2019. Dijo que este año ya va a ser difícil que se logre, pese a la recuperación de mercados tan importantes como el estadounidense, donde las ventas de aceite y vino están mejorando de forma sustancial en el arranque de este 2021 tras el levantamiento de los aranceles por parte de la Administración Biden.
FIAB pide al Gobierno que alimentación y bebidas sean una “prioridad” en el reparto de los fondos europeos, como primer sector industrial del país, y que no suba los impuestos a sus negocios para facilitarles la recuperación.
El secretario general de Agricultura explicó que su departamento prevé sacar a mediados de este año las convocatorias del PERTE del sector agroalimentario que tiene previsto lanzar el Gobierno, y que explicó que tendrá como objetivo dar salida a “proyectos transformadores” en los que prime la sostenibilidad y la innovación.
(SERVIMEDIA)
11 Mayo 2021
JRN/gja