Así lo aseguró hoy en rueda de prensa el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, quien destacó la participación de los vecinos en el rediseño de la zona. Explicó que 567 viviendas que hay en la zona, con una superficie inferior a los 50 m2 y repartidas en 34 bloques levantados hace más de 50 años, se sustituirán por otras 567 de nueva construcción y, siempre que sea posible, con un 20% más de superficie.

El alcalde indicó que el cambio de vivienda no tendrá ningún coste para los vecinos, excepto en aquellos pisos donde aumente la superficie. En ese supuesto, igual que ocurre con las plazas de garaje a las que podrán optar, la valoración se realizará de acuerdo con el precio del módulo de vivienda pública protegida.

Señaló que los pisos se sustituirán de forma escalonada, lo que permitirá pasar directamente de la vivienda usada a la vivienda nueva, evitando realojos provisionales. Los nuevos bloques tendrán orientación sur y espacios libres entre ellos de acceso público, de forma que tendrán un soleamiento máximo para mejorar la eficiencia energética de los edificios.

Hasta la fecha, de los 567 propietarios de los pisos, el 80% ha aceptado la operación de sustitución, mientras que el 12% no ha firmado el documento y un 6% no ha sido localizado. Gallardón indicó que para que la operación se lleve a cabo es necesaria la unanimidad de los vecinos, en la que el Ayuntamiento trabaja actualmente.

La edificabilidad máxima del nuevo Barrio del Aeropuerto alcanzará los 70.400 m2, de los que 40.551 m2 se destinarán a uso residencial y otros 28.999 a terciario. El Plan Parcial contempla, además, 17.246 m2 para zonas verdes y 9.632 m2 para instalaciones deportivas y equipamientos.

El Barrio del Aeropuerto fue construido en los años sesenta para los obreros del aeropuerto de Barajas y hoy está rodeado por la Nacional II y la M-40. Con la aprobación inicial hoy del Plan Parcial, el Ayuntamiento quiere responder a la demanda vecinal y avanzar en el reequilibrio de la ciudad al sustituir un barrio por otro completamente renovado.