En una entrevista en RAC1 recogida por Servimedia, Iglesias justificó por “la dimensión de las amenazas” el que haya querido divulgarlas, cuando hace dos años era partidario de ignorar y no dar publicidad a este tipo de iniciativas. Y apuntaló su argumento con las propias palabras de Marlaska cuando le llamó por teléfono personalmente para comunicarle que había llegado al Ministerio del Interior una carta con una amenaza de muerte acompañada de cuatro balas de fusil Cetme para él, sus padres y su pareja y ministra de Igualdad, Irene Montero.

“No son lo mismo las amenazas que recibíamos hace dos años, que no tenían posibilidad de hacerse ciertas y de hacerse verificables, que lo que llevamos viviendo este año, desde el acoso al domicilio o a que te llame el ministro del Interior para decirte, ojo, que esos proyectiles que estamos recibiendo son otra cosa y mucho cuidado, porque sí hemos detectado la posibilidad de que haya lobos solitarios que se pueden activar en cualquier momento, precisamente por este clima de impunidad y de odio, y estamos en unas circunstancias en las que toca protegerse y toca actuar de otra manera”, relató.

Ya antes de esa narración, Iglesias había alegado que “el ministro del Interior no te llama por cualquier tontería, que “amenazas de muerte por redes sociales o por carta recibimos muchas veces” y que le llamada revela que “hay elementos que les hace estar preocupados”, para remarcar el rasgo distintivo de esa carta de amenaza, a la que se unió otra contra él que interceptó el martes Correos y que iba dirigida a la Dirección General de la Guardia Civil pero contenía otra amenaza contra el líder de Podemos.

Por lo demás, el candidato a la Presidencia de la Comunidad de Madrid reiteró su tesis de que estas amenazas llegan porque el caldo de cultivo de la ultraderecha “no se ha cortado cuando se tenía que cortar”, y, por tanto, por la “impunidad” que a su juicio percibe dicho sector ideológico de que los jueces no castigaran el exlegionario que disparó contra retratos de ministros o el cartel de Vox contra los menas.

“DISPOSITIVOS MEDIÁTICOS”

“Si los fascistas se sienten impunes para hacer determinadas cosas, pasa lo que pasa”, denunció, reprochando la “presencia de dispositivos mediáticos” en ese caldo de cultivo y llamando de nuevo a contestar en las urnas el 4 de mayo. “Por supuesto, hay que judicializar las amenazas, pero hace falta una respuesta democrática y cívica”, arengó.

Cuando se le recordó que la presidenta de la Comunidad de Madrid y candidata del PP a la reelección, Isabel Díaz Ayuso, también ha sido objeto de una carta con balas, lo cual podría desmentir la atribución exclusiva a la derecha, Iglesias prefirió contestar que Podemos condenó “sin peros, sin matices, sin echar balones fuera” la misiva dirigida a Ayuso, que fue interceptada también el martes, en este caso en la provincia de Barcelona.

Lo que sí hizo Iglesias fue replicar a las acusaciones respectivas de la propia Ayuso y de la candidata de Vox, Rocío Monasterio, de que es él el que anda siempre “coqueteando con la violencia” y de que, en relación con los comicios de 2019, “el elemento diferenciador y quien introduce la violencia en campaña”.

“Y la culpable de la violación es la mujer que va en minifalda”, comparó gráficamente el líder de Podemos, quien, a instancias del entrevistador, admitió cierto paralelo entre los ataques sufridos por él y los denunciados en su día por el independentismo catalán. “La ultraderecha y los poderes profundos del Estado reaccionan ante cualquier anhelo democrático”, diagnosticó Iglesias, describiendo que “el procesismo representó un anhelo democrático autodeterminista”.