Abascal hizo este llamamiento en un mitin en la Plaza de España de esta localidad del sur de Madrid, donde dio comienzo oficial a la campaña del 4-M junto a la cabeza de lista de este partido, Rocío Monasterio.

Vox reunió a centenares de personas en un acto que se celebró sin sobresaltos, ya que efectivos de la la Policía Nacional controlaron los accesos a la plaza desde primeras horas del domingo, con lo que no se registraron incidentes como los del pasado 7 de febrero en Vallecas.

En su intervención, Abascal afirmó que el 4-M “nos jugamos el asalto comunista a la Comunidad de Madrid”, motivo por el que habían iniciado la campaña de Móstoles como la comenzaron en Covadonga (Asturias) en las elecciones generales. Aludía así al hecho de que el 2 de mayo de 1808 se dictó en la localidad mostoleña el llamado 'Bando de Independencia', que dio comienzo a la rebelión del pueblo madrileño contra la invasión francesa.

“Móstoles”, afirmó el líder de Vox, “es un símbolo de la fuerza del pueblo de Madrid que no se va a dejar arrebatar ni la libertad, ni la convivencia, ni la patria por parte de aquellos que han pactado con todos los enemigos de nuestra nación y del orden constitucional (en referencia al PSOE, Podemos y los partidos independentistas)”.

“ENCRUCIJADA PARA ESPAÑA”

Afirmó que la cita con las urnas del 4-M no son unas meras “elecciones regionales”, sino una “encrucijada para toda España”, que puede ser “principio del fin del Gobierno de Pedro Sánchez” y que conlleve que “el del moño”, por Pablo Iglesias, “se tenga que retirar de la política e irse a Cuba o Venezuela”.

Al mismo tiempo, Abascal reprochó al líder del PP, Pablo Casado, que haya filtrado que no quiere a Vox dentro del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso en el caso de que sea indispensable la colaboración entre ambos partidos tras comicios. “No seáis torpes”, dijo al respecto, “no vendáis la piel del oso antes de cazarlo, no os empecéis a repartir los sillones antes de ganar las elecciones”.

Frente a este planteamiento, indicó que la “función política y social” de Vox en estas elecciones es impedir el “asalto comunista” a Madrid y destacó que, a diferencia de Casado, ellos siempre mantendrán una “distancia infinita” con Sánchez, su Gobierno y con el PSOE.

Por su parte, Monasterio también apeló a la rebelión de 1808 en Móstoles contra los franceses y dijo que los habitantes de esta localidad son “valientes” y “aguerridos”, algo que indicó también es Vox, que no se asusta ni “ante las piedras y los adoquines” ni “ante las políticas de la izquierda”.

Aseguró que Vox acude a los comicios del 4-M con la intención de “desmontar de una vez por todas todas las políticas de la izquierda”, ya que el PP “no se atreve”. Además, Monasterio elogió a los madrileños que viven en localidades como Móstoles, que tienen que hacer frente a dificultades que no tienen políticos como el del “chalet de Galapagar”, en referencia a Iglesias.