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Sector financiero

Ibercaja descarta fusiones y ajustes extra de plantilla con el foco en ser más rentable para salir a Bolsa

- La entidad monitoriza el mercado para que su fundación pueda bajar la cuota accionarial del 88% al 40%

MADRID
SERVIMEDIA

Ibercaja pondrá el foco en crecer en empresas, banca personal y seguros para superar el 7% de rentabilidad sobre fondos propios (ROTE) de aquí al 2023 con un proyecto “propio e independiente”, sin entrar en fusiones, y con la intención de repartir el 50% del beneficio en dividendos porque aspira a dar el salto a Bolsa antes de concluir el año 2022.

Así lo explicaron su presidente, José Luis Aguirre, y el consejero delegado, Víctor Iglesias, este miércoles en una rueda de prensa, donde subrayaron que su apuesta es continuar singladura autónoma, dando “continuidad a una historia de 145 años de función financiera, económica, social y territorial”, y porque hay “espacio” para “entidades medianas” como Ibercaja.

“No estamos pensando ninguna operación corporativa. No está en nuestra hoja de ruta ni está en nuestra mesa ni está en nuestro pensamiento”, dijo tajante el consejero delegado. Al respecto apuntó que el equipo directivo y el Consejo estarán centrados y dedicados "en cuerpo y alma” en “mejorar nuestro propio proyecto” y hacerlo “más competitivo”, “eficiente”, “más rentable” y “atractivo” para atraer a potenciales inversores cuando decida salir a cotizar.

A pesar de las permanentes llamadas de los supervisores a la integración del sector, Iglesias negó que Ibercaja haya tenido presión alguna para participar en el baile de uniones “ni en Francfort ni en Cibeles”, en alusión al BCE y al Banco de España. “Presiones ninguna, ni el presidente ni yo hemos recibido nunca ninguna presión para fusionarnos, pero, rotundamente, nunca”, reiteró, defendiendo que es lo lógico para una entidad que “va bien, que es prudente”, “ortodoxa” y “no da problemas”.

Defendió que el modelo de Ibercaja es viable y estimó que el sector está muy concentrado ya porque se ha pasado de 50 a 10 entidades desde la anterior crisis y tras las integraciones de CaixaBank y Bankia y Unicaja y Liberbank, las cinco primeras entidades tienen cuotas en créditos y recursos de clientes que “por primera vez en la historia pasan del 70% del mercado”. “Esto en el 2008 era el 40%”, agregó y reparó en que rebasa el 30% existente en Alemania y Reino Unido y el 50% en Francia e Italia.

“De largo, España es el país que más concentración bancaria ha hecho en los últimos años y el que más concentrado está”, quedando a su juicio 10 entidades “sólidas, bastante competitivas y viables por nosotros solos”. “Hay suficiente concentración. Sería más importante preocuparse por conservar el nivel de competencia bancaria”, aconsejó. Bajo este convencimiento apuntó que si se produjera “nunca vendría por necesidad” sino por principio de voluntariedad y tendrá que tener un claro sentido industrial”.

El presidente del banco añadió que la independencia es lo que quiere su accionista, la Fundación Bancaria Ibercaja, porque desea continuar teniendo un banco “de Aragón” y es la fórmula para mantener un modelo de negocio heredero de las antiguas cajas de ahorros, con arraigo territorial y dedicado fundamentalmente al mercado de familias y pymes. “Siendo prudentes y solventes en el riesgo, la sociedad lo agradece y lo agradecerá que existan entidades de este tamaño”, afirmó.

La nueva hoja de ruta busca mejorar su rentabilidad desde el 3% actual a un 7% en los próximos tres años con intención de resultar atractivo como inversión ya que la intención de la Fundación es sacar a Bolsa el banco, a fin de reducir su participación accionarial por debajo del 50% como le exige la ley. Su plan es bajar la cuota desde el alrededor del 88% actual a una participación en el umbral del 40%, según deslizaron.

Para cumplir con esa exigencia tienen hasta el 31 de diciembre del 2022 y la alternativa a dar el salto al parqué sería crear una millonaria hucha o fondo de reserva antes del 2025 para poder ayudar al banco en caso de dificultad.

DAR ENTRADA A UN ACCIONISTA

“La opción preferida de la Fundación Bancaria Ibercaja sería hacerlo mediante la salida a Bolsa”, indicaron ambos directivos, reconociendo que si fuera desaconsejable salir a cotizar por mala coyuntura bursátil como ha ocurrido hasta ahora tiene todas las alternativas de desinversión abiertas. Ahí una opción sería, por ejemplo, ampliar capital para dar entrada a otros accionistas o directamente vender una participación de la Fundación.

“Tenemos por delante 20 meses y estaremos monitorizando el mercado” para identificar cuando pueden darse las “circunstancias favorables”, explicó el consejero delegado. Según recordó, el proyecto de salida a Bolsa ya está preparado porque hicieron todos los trámites precisos entre finales del 2018 y principios del 2020, y justo estaban “en la última milla” con la presentación a bancos de inversión internacionales cuando estalló la pandemia.

Ibercaja cerró el 2020 con una rentabilidad o ROTE cercana al 1% porque tuvo que encajar 250 millones en costes asociados al Expediente de Regulación de Empleo (ERE) acordado con los sindicatos y por provisiones para los riesgos potenciales de la crisis de la Covid-19. Sin esos cargos, se aproxima al 3% y la intención es subirlo este año hacia el 3,5-4%, superar el 5% a finales del próximo ejercicio y rebasar el 7% al final del plan estratégico en el año 2023.

El consejero delegado garantizó que para su mejora no prevén nuevos ajustes tras haber acordado el pasado año la salida de 750 trabajadores o el 15% de la plantilla, y la clausura de unas 200 oficinas, equivalente al 20% de la red del banco. “No estamos pensando realizar ningún otro ajuste más porque no tiene sentido (…) El que tenemos que hacer lo vamos a implementar en los próximos 15 meses”, aseguró, en alusión a que tras acordarlo ahora tienen que producirse las salidas y clausuras de oficinas.

La mejora vendría por hacer los procesos más eficientes y por elevar los ingresos con su apuesta por productos más rentables como los seguros, fondos de inversión y de pensiones y el negocio con empresas.

NO HABRÁ MÁS DESPIDOS

Al ser cuestionado sobre si es suficiente fijarse una meta del 7% en rentabilidad cuando el mercado cifra en el 8-10% el coste de capital para la banca, defendió que es suficiente para entidades como Ibercaja con bajo perfil de riesgo, y descartó que haya condiciones que puedan propiciar una fusión si se cumplen porque ese tipo de operaciones solo ayudan para abaratar los costes cuando hay solapamiento de red. “No te aporta nada más para alguien que tenga todo lo demás como tenemos nosotros”, concluyó.

Por su parte, el presidente de Ibercaja indicó que la Fundación, dueña del 88% del banco, “no tiene necesidad de obtener la rentabilidad del 7% ya”. La nueva hoja de ruta fija entre sus principales metas multiplicar por 1,5 las captaciones de nuevos clientes en banca personal y banca privada, así como incrementar un 23% o crecer un 8% anual en gestión de activos.

(SERVIMEDIA)
14 Abr 2021
ECR/clc