Guardia Civil
Localizada en Toledo una plantación subterránea de marihuana de más de 200 metros cuadrados
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La Guardia Civil ha localizado en Toledo, en el marco de la 'operación Búnker’, una plantación subterránea de marihuana de más de 200 metros cuadrados, donde había 2.466 plantas de una variedad inédita de esta droga que permitía una recolección cada 25 días.
Según informó este miércoles el Instituto Armado, en esta operación han sido detenidos un hombre y a una mujer, a los que se acusa del delito de cultivo o elaboración de estupefacientes. Los arrestados fueron puestos a disposición del juzgado de la localidad de Torrijos.
Las pesquisas se iniciaron al conocerse la un posible existencia de un cultivo ilegal de marihuana en la localidad de Fuensalida, en la provincia de Toledo. Los agentes centraron su investigación en una finca rural aislada, de unos 1.000 metros cuadrados, que estaba vallada. Desde el exterior únicamente se podía apreciar un par de módulos prefabricados, utilizados supuestamente como vivienda y trastero.
A pesar de la apariencia externa del lugar, se confirmó la relación del hombre que allí vivía con un posible delito de cultivo ilegal de marihuana, por lo que se solicitó a la autoridad judicial una entrada y registro en esta propiedad.
En el interior de los prefabricados se descubrió una escalera de caracol de unos tres metros de bajada, que daba acceso a una excavación subterránea. La estancia inferior estaba perfectamente tabicada, techada y compartimentada con muros de hormigón y ladrillo, de unos 200 metros cuadrados, donde había instalado un sistema para el cultivo de alto rendimiento de marihuana repartido en cinco estancias.
NUMEROSAS FLORACIONES
Los agentes comprobaron que esta compleja infraestructura contaba con un sistema calorífico innovador con paneles de lámparas led, filtros de ozono para minimizar el olor que tenían salida al exterior por siete bocas disimuladas en tinajas ornamentales de jardín, además de un sistema de riego por goteo individualizado conectado a las 2.466 plantas que allí había.
Estas plantas, sobre las que había una malla poco espesa que determinaba su nivel máximo de altura, eran de una variedad inédita que precisan un menor crecimiento para producir numerosas ramificaciones y floraciones, pudiendo conseguir una cosecha en tan solo 25 días. Para la alimentación eléctrica de este sistema, disponían de dos potentes generadores, valorados en unos 10.000 euros cada uno y que consumían unos 500 litros de gasoil semanales.
En el registro realizado en la parte utilizada como vivienda, los agentes intervinieron un arma corta real que estaba oculta en el dormitorio, junto con otras cuatro armas de fuego simuladas, tres kilogramos de aceite de hachís, 982 gramos de cogollos de marihuana y 364 gramos de polen de esta planta.
La Guaria Civil realizó una estimación sobre el coste económico de la construcción de esta infraestructura subterránea, así como de la instalación dispuesta para este cultivo intensivo de marihuana, superando los 200.000 euros de inversión.
(SERVIMEDIA)
31 Mar 2021
BMG/nbc