El trabajo, presentado este lunes, evidencia una "gran disparidad" en los servicios sanitarios entre las CCAA, que, lejos de disminuir, tiende a aumentar, señala la Fadsp.

Entre otros aspectos, el documento analiza la financiación, recursos y funcionamiento de la sanidad en las distintas comunidades, deteniéndose en ítems como las listas de espera, el gasto farmacéutico, el gasto per cápita, número de camas por mil habitantes, pacientes que atiende cada médico de primaria, o la valoración que hacen los ciudadanos de los servicios de salud que reciben.

Teniendo en cuenta éstos y otros elementos, el trabajo establece una serie de puntuaciones y divide a las comunidades en cuatro grupos, en función de cómo son sus servicios sanitarios.

Tras el de servicios "deficitarios" coloca al de "servicios sanitarios regulares", en el que figuran Baleares, Andalucía y Murcia.

En el apartado de CCAA con "servicios sanitarios aceptables", la federación incluye en su informe de 2011 a País Vasco, Castilla-La Mancha, Cantabria, La Rioja, Extremadura y Cataluña.

Finalmente, son Navarra, Asturias, Castilla y León y Aragón las comunidades autónomas que mejor aparecen en el estudio, pues conforman el grupo de regiones con "buenos servicios sanitarios".

A este respecto, el trabajo subraya que las últimas CCAA siguen siendo mayoritariamente las mismas, que tres de ellas (Canarias, Madrid y Valencia) permanecen en los cuatro últimos puestos durante los seis últimos años analizados y que Valencia es la última en siete de los ocho años estudiados (entre ellos los cinco últimos).

Cataluña, con 4,19 camas por cada mil habitantes, seguida de Asturias (3,96) y Navarra (3,86) son las CCAA mejor situadas a la hora de analizar este servicio. En el lado opuesto se encuentran Andalucía (2,41), Comunidad Valenciana (2,44) y Castilla y León (2,63).

Finalmente, Defensa de la Sanidad Pública denuncia la dificultad con que sigue encontrándose para acceder a los datos que analiza. Considera "intolerable que en una sociedad democrática se escondan a los ciudadanos datos esenciales del funcionamiento de un sistema sanitario que sufragan con sus impuestos".