En concreto, Maneiro pidió al Gobierno central “que rechace absolutamente cualquier tipo de diálogo o negociación con los terroristas y que inste a la Fiscalía a ilegalizar Bildu y al Gobierno vasco que persevere en la estrategia de tolerancia cero” con el entramado terrorista.

Según este parlamentario, el Ejecutivo vasco debería decir ”alto y claro que nunca tratará a los representantes batasunos como representantes democráticos, no mientras siga existiendo ETA y no exijan su disolución incondicional y definitiva".

Respecto al año transcurrido desde que la banda criminal anunciara su última tregua, Maneiro señaló que "todo este tiempo ha sido utilizado por la autodenominada izquierda abertzale para colarse en las instituciones democráticas”.

A su juicio, Bildu ha llegado a los ayuntamientos “a pesar de que no han roto con ETA, de que no han condenado su historia criminal y de que no han pedido a ETA que desaparezca incondicionalmente, lo cual ha sido una muy mala noticia para la democracia en Euskadi y en España y un paso atrás en la lucha contra la banda terrorista”.