Los agentes sociales se reunieron hoy para tratar de reactivar el diálogo bipartito y llegaron al acuerdo de crear este grupo de trabajo, en el que habrá dos representantes de cada parte y que dentro de 15 días deberá sacar unas conclusiones sobre la situación de la negociación colectiva.

En declaraciones a Servimedia, el secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer, reiteró que en la actualidad hay cerca de 3,5 millones de trabajadores que están sin convenio.

Además, subrayó que "lo más preocupante" es que hay 1,5 millones de trabajadores que están sufriendo como los empresarios incumplen su convenio que ya tenían cerrado y que no están aplicando el incremento salarial.

Además, hay otros 1,9 millones de trabajadores que tienen que renovar el convenio pero la dirección de sus empresas no se sienta a negociar.

Ferrer apuntó que los sindicatos ya están denunciando los incumplimientos de convenio por parte de los empresarios y aseguró que los jueces ya les están dando la razón.

En este sentido, el dirigente de UGT reclamó a la CEOE que dé orden a sus patronales para que los empresarios cumplan con los convenios, y aseguró que ésta es una de las exigencias de los sindicatos para "negociar algo más" en el marco del diálogo social.

Por su parte, el secretario de Comunicación de CCOO, Fernando Lezcano, hizo una "valoración positiva" de la reunión "en la medida en que se ha aceptado la creación de ese grupo de trabajo".

Sin embargo, advirtió a los empresarios de que, una vez pasado el plazo de 15 días y presentadas las conclusiones, "será el momento de resolver, no aceptaremos nuevas dilaciones".

No obstante, la patronal CEOE envió hoy una nota de prensa en la que destaca la creación de este grupo de trabajo pero reitera que la negociación colectiva se está desarrollando con "unas pautas similares a las de años anteriores".

Asimismo, añade que, en la actualidad, el 73% de los trabajadores están cubiertos por convenios colectivos.

Además, defiende la necesidad de "modernizar" la negociación colectiva para permitir una mayor "gestión interna de las empresas".

También reitera su exigencia de que el Ejecutivo aborde una reforma estructural de la economía española para "mejorar su competitividad y su capacidad de crear riqueza y empleo".