Madrid. El Cermi denuncia las dificultades de movilidad que genera la Ley del Tabaco a las personas con discapacidad

- Sostiene que el mobiliario para los fumadores que hay en las calles es un "peligro" para los ciudadanos con problemas de visión

MADRID
SERVIMEDIA

El Comité de Entidades de Representantes de Personas con Discapacidad de la Comunidad de Madrid (Cermi Comunidad de Madrid) denunció este miércoles el "peligro" que la entrada en vigor de la Ley del Tabaco está suponiendo para personas con movilidad reducida o discapacidad visual, debido a la ubicación en las calles de mobiliario sin señalizar para los fumadores, lo que entorpece el tránsito.

Con esta norma, explicó el citado comité, los usuarios de los locales de ocio tienen que salir a la calle a fumar y sitúan mobiliario "no autorizado" en las aceras sin control, además de que la instalación de un gran número de terrazas bloquea el paso de las personas que cuentan con ciertas limitaciones de movilidad.

Por ello, Cermi Madrid exige mayor control de esta situación a las administraciones públicas y una regulación que delimite los espacios autorizados en la calle.

Esta situación supone para la entidad "un claro retroceso en una lucha que, hasta el momento, había conseguido introducir en la conciencia de la Administración la necesidad de mejorar la accesibilidad de aceras, con medidas como su aumento del ancho o la ejecución de un mayor número de rebajes".

A su juicio, la nueva situación generada por la entrada en vigor de la reforma de la Ley del Tabaco está limitando la libre circulación de las personas con algún tipo de discapacidad "y propiciando accidentes que están poniendo en peligro su integridad física".

El comité asegura que en muchas ocasiones las personas ciegas o con movilidad reducida han de desviar su trayectoria por la calzada, conjugando su circulación con la de los vehículos y trayectos poco asiduos.

Por todo esto, agrega, "centrarse sólo en los males que la ley tiene para los vecinos, para los fumadores o para los hosteleros, obviando al colectivo de la discapacidad, es un error y una falta de sensibilidad que demuestra el egoísmo que todavía mueve muchas de las acciones de la Administración".

El comité considera que "cuando se impone una nueva norma es preciso tener en cuenta las consecuencias y el impacto negativo que pudiera tener para todos los ciudadanos, no sólo para unos pocos".

(SERVIMEDIA)
27 Jul 2011
IGA/caa