Si en la semana del 18 de enero había 4.439 mayores infectados por coronavirus en las residencias, un mes después eran sólo 215, lo que significa una reducción del 95% en el número de casos.

La mayoría de comunidades comenzaron a vacunar a sus residentes en los últimos días de diciembre de 2020 o a principios de 2021. Si en la penúltima semana del año pasado había un 12,4% de residencias con algún caso positivo, el porcentaje se redujo al 2% en la tercera semana de febrero de este año.

Esto también ha tenido un efecto sobre la mortalidad. Si en la semana del 25 de enero murieron 719 residentes por Covid-19, en la semana del 15 de febrero fueron 157; es decir, los fallecimientos por coronavirus cayeron un 78% en menos de un mes.

Estos datos son profundamente esperanzadores, sobre todo si se tiene en cuenta que las residencias de mayores fueron los espacios más golpeados por la pandemia del coronavirus en la primera ola con situaciones verdaderamente dramáticas.

Según datos del Imserso, desde el 14 de marzo de 2020 hasta hoy han fallecido por Covid-19 confirmado un total de 19.549 mayores de las residencias. A ellos habría que sumar otras 9.859 muertes sospechosas de coronavirus sin llegar a ser confirmadas, lo que elevaría el total de fallecidos en residencias a 29.408.

Otro dato que da buena cuenta de la evolución positiva de la pandemia en las residencias de mayores es que hay cinco comunidades autónomas donde, actualmente, no hay ni un solo residente contagiado en estos centros. Son Asturias, Cantabria, Murcia, Navarra y La Rioja.