Oncología

La Estrategia en Cáncer pretende mejorar la calidad de la atención de los pacientes oncológicos

MADRID
SERVIMEDIA

La actualización de la Estrategia en Cáncer, aprobada por unanimidad en el pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (Cisns), ahonda la prevención mediante estilos de vida saludables; el diagnóstico precoz; la progresiva extensión del modelo de atención multidisciplinario y cooperativo basado en redes asistenciales entre profesionales y centros; el enfoque específico de algunos tumores a través de centros de referencia nacionales y europeos, o los avances en medicina de precisión.

Según informó este martes el Ministerio de Sanidad, el documento, que se acaba de publicar y que es el resultado del trabajo conjunto y el consenso de las sociedades científicas, asociaciones de pacientes, Instituto de Salud Carlos III, y comunidades autónomas, también se ocupa de retos aún no suficientemente resueltos como la atención psicológica y la evaluación de las necesidades de los pacientes que han sobrevivido al cáncer.

La Estrategia, dirigida a mejorar la calidad de la atención que reciben las personas con cáncer y sus familias, recoge 40 objetivos, 52 acciones para alcanzarlos, 99 indicadores de evaluación de la consecución de estos objetivos y acciones y 5 líneas de actuación: promoción de la salud y prevención en cáncer, atención sanitaria, atención sanitaria a la infancia y adolescencia, datos e información de cáncer e investigación.

Para ello, el documento establece un conjunto de objetivos y recomendaciones sobre la calidad de las intervenciones y resultados de los servicios y de la atención sanitaria. Los objetivos y acciones de la Estrategia en Cáncer del SNS están alineados con los del Plan Europeo aprobado el 3 de febrero y se trabajarán conjuntamente durante los próximos años de implementación.

ASPECTOS DE LA ESTRATEGIA

Así, la Estrategia desarrolla el Código Europeo contra el Cáncer que define 12 recomendaciones dirigidas a la ciudadanía para prevenir el cáncer y se incorporan nuevos aspectos en la prevención del cáncer asociado al ámbito laboral y a la exposición al radón.

Además, la aprobación por el Consejo interterritorial del cribado poblacional del cáncer de cuello de útero, junto con el de cáncer de mama y colorrectal, es fundamental para detectar precozmente el cáncer y, por lo tanto, mejorar la supervivencia.

La nueva Estrategia apunta a la medicina de precisión como nueva manera de abordar el diagnóstico y el tratamiento del cáncer, no sólo por los biomarcadores asociados a la decisión terapéutica sino también, por la posibilidad de estratificar mejor la enfermedad, el pronóstico y por evaluar la predicción de la respuesta al tratamiento o de la toxicidad.

PREVENCIÓN Y CONTROL DEL CÁNCER

También el pleno del Cisns aprobó el acuerdo sobre la Covid-19 y la prevención y el control del cáncer, queda respuesta al mandato de la Comisión de Sanidad y Consumo del Senado, de octubre de 2020 y ha sido elaborado y consensuado por el Comité de Seguimiento y Evaluación de la Estrategia en Cáncer del SNS, formado por las sociedades científicas y asociaciones de pacientes relacionadas con cáncer, las comunidades autónomas, el ISCIII y el Ministerio de Sanidad.

El documento reflexiona sobre el impacto que la pandemia Covid-19 ha podido tener en la atención al cáncer, que, aunque aún no se conoce de manera global, sí se ha observado la interrupción de procedimientos y tratamientos de riesgo, y una mayor presión en la capacidad hospitalaria y la Atención Primaria.

Así, se acordaron prioridades de actuación a implementar en el SNS con el objeto de mejorar la atención sanitaria a las personas con cáncer durante la pandemia. Se evaluará el impacto de la pandemia de la Covid-19, mediante análisis de los datos asistenciales y epidemiológicos disponibles de todo el Sistema Nacional de Salud, y se mantendrán los programas de cribado.

El acuerdo establece criterios comunes sobre los aspectos asistenciales que deberían ser modificados tras el primer impacto de la pandemia, entre otros, la mejora del diagnóstico en la atención primaria favoreciendo la evaluación de síntomas de sospecha de cáncer a través de la consulta presencial y manteniendo las revisiones del programa del niño/a sano/a; y asegurar el acceso a pruebas diagnósticas en atención primaria y hospitalaria a través de circuitos protegidos frente a la Covid-19.

(SERVIMEDIA)
02 Mar 2021
ABG/gja