Según precisó este viernes el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, la ganancia de competitividad “se debe al descenso del índice de precios relativos, que fue superior a la apreciación del euro frente a las divisas de aquellos países comunitarios que no pertenecen a la zona euro”.

Para la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, este índice refleja que “tras la buena evolución en 2019 con una mejora generalizada de la competitividad precio de la economía española, en 2020 se han logrado nuevas ganancias de competitividad-precio frente al resto de la Unión Europea, que constituye nuestro principal mercado”.

Frente a la OCDE, el Índice de Tenencia de Competitividad se incrementó un 2,0%. La evolución de los precios en España, más moderada que en la OCDE, sólo pudo compensar parcialmente la apreciación del euro frente a las principales monedas de esta zona.

En relación con los países BRICS, dicho indicador aumentó a su vez un 5,5% interanual en el mismo periodo. En este caso el empeoramiento de la competitividad frente a esta zona se debió a la apreciación del tipo de cambio en un 7,8%, mientras que el índice de precios relativos disminuyó un 2,2%.

Los últimos datos del indicador calculados con otros índices de precios o costes vienen referidos al tercer trimestre de 2020 y muestran pérdidas de competitividad. El ITC medido con Índices de Valor Unitario (IVUs) empeoró frente al conjunto de la UE-27 (3,2%), debido principalmente al incremento del índice de precios relativos.

Por su parte, el indicador de competitividad calculado con Costes Laborales Unitarios (CLUs) frente a la UE-27 creció un 1,8% en el tercer trimestre de 2020. La causa fue el comportamiento del índice de costes laborales unitarios, que se incrementó un 1,4%, unido al índice de tipo de cambio que subió un 0,4%.