Aguado se mostró convencido de que “invertir en ciencia es invertir en futuro” y defendió que la recuperación exige una apuesta decidida por una economía sólida basada en el conocimiento. Para ello, es necesario, señaló, un impulso a la investigación y la innovación “como palanca de crecimiento”.

“Sin ciencia no hay futuro y no hay progreso”, afirmó Aguado, quien dijo que la apuesta del Ejecutivo regional por la investigación “es clara y más decidida que nunca, sobre todo dadas las actuales circunstancias mundiales derivadas de la pandemia”.

Asimismo, apostó por “seguir situando a la ciencia en el centro de las políticas”, y construir “una región puntera y alejada del conformismo”. En su opinión, “tenemos una oportunidad única para dar un espaldarazo a la ciencia en la Comunidad”.

TRANSFORMACIÓN

Durante la reunión, el vicepresidente trasladó a los directores de los Imdea el apoyo del Gobierno autonómico a estos organismos, que “son el mejor y más exitoso ejemplo de focalización en ámbitos estratégicos de investigación científica y tecnológica regional”.

Suponen "un apoyo extensible a las actividades investigadoras y acciones específicas en tecnologías disruptivas que desarrollan".

La Comunidad de Madrid cuenta con siete Institutos Madrileños de Estudios Avanzados, en: Agua, Alimentación, Energía, Materiales, Nanociencia, Networks y Software. Fundados entre 2006 y 2007, en este tiempo han desarrollado más de 1.427 proyectos de I+D.

Su misión es ser una palanca de transformación de la sociedad y la industria, a través de la generación de conocimiento y tecnología en ámbitos específicos de alto impacto socioeconómico, e identificados como estratégicos tanto por las empresas como por la sociedad.

Las 726 personas que trabajan actualmente en los proyectos de I+D de los IMDEA generaron en 2019 un volumen de actividad de 41,4 millones de euros.

La mitad de esa cantidad proviene de la financiación que aporta la Comunidad de Madrid y el otro 50% de fondos externos.

Los centros captan la financiación adicional en convocatorias públicas competitivas (internacionales, estatales y regionales), así como a través de contratos con empresas.

Se han firmado 556 contratos con entidades de todo el mundo, como Microsoft, Google, Airbus o Boeing. Además, ocupan puestos destacados en los rankings internacionales de publicaciones científicas y tienen en su haber 38 patentes concedidas y otras 32 solicitadas.