En este sentido, recordó que si Illa o el ministro de Política Territorial y Funciones Públicas, Miquel Iceta, aceptaron por motivos “partidistas” acudir a manifestaciones de “ultraderecha con Vox”, un partido que “va en contra” de la historia, de la lengua, de la cultura, “casi de la población catalana”, aceptarán los votos de esa misma formación.

“Si le dan los números”, continuó Rufián, será presidente con los votos de Vox, pero recordó que en política “nada es gratis” y que todo el mundo conoce el coste que tiene llegar a la Generalitat con los votos de “la ultraderecha”. “Contra el independentismo todo vale”, apuntó.

A su juicio, existe otro escenario “probable y plausible” que es que JxCat le dé la presidencia al PSC. A su juicio, si “ya le dio” la tercera institución de Cataluña, en referencia a la Diputación de Barcelona, para que no gobernara ERC también “lo puede hacer con la primera”, la Generalitat.

Rufián indicó que la mejor solución para evitar “estas tentaciones, tanto de un lado como de otro”, es que ERC gane las elecciones de forma “indiscutible”.