La dirección del PP vasco, con Antonio Basagoiti a la cabeza, se reunió esta mañana en Madrid con el vicesecretario general de Política Territorial del PP, Javier Arenas, para explicarle los motivos que llevaron a su partido a secundar la reforma junto a PSE y PNV.

Según confirmaron a Servimedia fuentes presentes en el encuentro, Basagoiti y el resto de la delegación vasca trasladó a Arenas que el denominado "blindaje del concierto económico" consiste en realidad en una mera reforma de las leyes del Tribunal Constitucional y del Poder Judicial para evitar que cualquier ciudadano pueda recurrir las normas que aprueben las Diputaciones Forales del País Vasco en materia de impuestos.

Esto suele provocar que empresarios de La Rioja, Cantabria o Castilla y León presenten un recurso por la vía de lo contecioso-administrativo cada vez que se sienten perjudicados cuando alguna de las provincias vascas baja los impuestos. Al hacerlo, la rebaja queda automáticamente suspendida hasta la resolución del recurso.

Con la reforma que PSE, PNV y PP han impulsado desde el Parlamento de Vitoria y que debe debatirse en próximas semanas en las Cortes Generales, se acabaría esta posibilidad y el recurso sólo sería posible ante el Tribunal Constitucional por parte de las comunidades autónomas o de un número superior a 50 diputados. Además, el recurso no supondría suspensión cautelar de la norma foral correspondiente.

COSPEDAL ANUNCIA VOTO EN CONTRA

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, aseguró hoy en rueda de prensa que su partido votará "en contra" de este blindaje del concierto de manera "consecuentemente" a lo hecho recientemente en una moción similar del PNV.

Sin embargo, fuentes populares aseguraron a Servimedia que la decisión final sobre este asunto "no está tomada todavía" y las declaraciones de la propia Cospedal forman parte de la "estrategia" de los populares para obligar al PSOE a que se pronuncie.

La dirección nacional del PP comprende la posición de sus compañeros vascos, que están presionando a Rajoy para que apoye la reforma ante la posibilidad de que el PNV la utilice durante la negociación de los Presupuestos Generales de 2010 y capitalice su posible aprobación junto al PSOE como si fuera "algo patrimonialmente suyo" cuando ha sido respaldado por todos.

En el PP, tanto en el País Vasco como en Madrid, están convencidos de que "es inaceptable" que el PNV utilice este asunto en la negociación de los Presupuestos y por eso aspiran a lograr una posición conjunta con el PSOE.

De ninguna manera quieren que socialistas y nacionalistas saquen adelante el blindaje y que los populares sean los únicos que se queden al margen.