Así se expresó Reynés en la conferencia con analistas para analizar los resultados de la compañía en 2020, año en que registró unas pérdidas de 347 millones de euros.

“Continuamos operando el negocio de forma habitual”, aseguró Reynés, quien indicó que la compañía está centrada en definir su nueva estrategia con el objetivo de aprovechar las oportunidades que ofrece la transición energética.

A este respecto, recordó que, tras conocer la existencia de la oferta de IFM, Naturgy decidió aplazar la celebración de su 'Capital Markets Day', a la espera de que se conozca el resultado de la OPA.

En cuanto a la oferta, aseguró que no existió ningún contacto con el fondo en el proceso de preparación de la OPA, que no fue solicitada y que Naturgy tuvo conocimiento de ella a través de su publicación en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

La oferta se dirige al 22,69% de Naturgy a razón de 23 euros por acción, lo que implica un desembolso máximo de 5.060 millones de euros si se cubre en su integridad. El precio ofrecido, que IFM se compromete a pagar en efectivo, implica una prima del 28,9% sobre el precio medio ponderado por volumen de las acciones de Naturgy durante los últimos seis meses; del 22,7% sobre el contabilizado en los últimos tres meses; y del 19,7% sobre su cotización del último día de negociación antes del anuncio.

El éxito de la oferta está condicionado a lograr, al menos, el 17% de aceptación del capital de Naturgy, lo que supone que la acepten los dueños de, como mínimo, 164.834.347 acciones de las 220.000.000 a las que se dirigirá la OPA y obtener las correspondientes autorizaciones regulatorias y de competencia. Entre ellas, figura obtener el plácet del Gobierno a través del Consejo de Ministros.

El fondo IFM explicó que, como gestor de activos propiedad de fondos de pensiones australianos, busca principalmente con la operación “obtener un rendimiento neto sostenible a largo plazo mediante la inversión en compañías de infraestructuras esenciales y de alta calidad”.