Así lo criticó en un comunicado en el que recordó que el protocolo del Ministerio de Sanidad en materia de prevención de riesgos laborales, en su actualización del pasado 21 de diciembre, recomendaba la utilización por parte de estos profesionales de mascarillas de una mayor protección, como son las FFP2, tras “evidenciarse científicamente la transmisión del coronavirus por aerosoles”.

Junto a ello, dicha actualización anulaba las que hasta ahora se estaban utilizando por los servicios de salud como “estrategias alternativas” en situación de crisis, que avalaban la utilización de EPIs de menor protección por “desabastecimiento”.

El sindicato ha “confirmado” que, “a día de hoy, están teniendo dificultades" en la obtención de mascarillas FFP2 "muchos" de lo enfermeros y fisioterapeutas que trabajan en estas regiones, por lo que “aumentan sus posibilidades de contagio”.

A este respecto, Satse lamentó la “insensibilidad” demostrada por las administraciones sanitarias de algunas autonomías hacia sus profesionales y puntualizó que, si bien se ha “generalizado” la distribución de mascarillas FFP2 en las denominadas ‘plantas Covid', no ocurre lo mismo en el resto de servicios y unidades de un hospital o en los centros de salud y sociosanitarios, a pesar de que, según su criterio, "no se tenga fiabilidad de la calidad del aire en estos espacios”.

Por ello, Satse exigió proporcionar a estos profesionales la “máxima protección” con una mascarilla autofiltrante tipo FFP2 o media máscara provista con filtro contra partículas P2 y demandó que se aumente la protección y se facilite el uso de mascarillas autofiltrantes contra partículas FFP3, o media máscara provista con filtro contra partículas P3, cuando se realizan procedimientos asistenciales en los que se puedan generar bioaerosoles en concentraciones elevadas.

La organización sindical subrayó que se está produciendo aún un “alto número de contagios” entre el personal sanitario, que, “en su mayoría”, se registran en su lugar de trabajo, por una exposición “constante” a aerosoles, “según la evidencia científica”.