Coronavirus
La asociación de directores y gerentes de servicios sociales dice que más de 100.000 cuidadoras no profesionales quedaron excluidas de la primera fase de vacunación
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
La Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales dijo hoy que la estrategia de vacunación frente a la Covid-19, acordada entre el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas, contempla vacunar a los grandes dependientes y a sus cuidadores tanto en residencias como en hogares, pero excluye expresamente 133.679 cuidadoras no profesionales que se hacen cargo de ellos.
El cuarto grupo de la primera fase de vacunación recoge a personas con grado III de dependencia -lo que se conoce como grandes dependientes- y a las personas cualificadas que les proporcionan “cuidados estrechos”, aunque especifica que “no se incluyen los cuidadores no profesionales”.
Según la asociación, esta exclusión afecta a 133.679 cuidadores no profesionales, de los que el 75% son mujeres. Actualmente, un total de 313.000 grandes dependientes que no viven en residencias están a la espera de ser vacunados en España como cuarto grupo de la estrategia de vacunación, continuó.
Indicó que la estrategia señala que se debe priorizar a residentes y personal sanitario y sociosanitario que trabaja en residencias de personas mayores y de atención a grandes dependientes.
Más tarde, en el segundo grupo, se encuentra el personal de primera línea en el ámbito sanitario y sociosanitario para, a continuación, pasar a otro personal sanitario y sociosanitario. En el cuarto grupo de esta primera fase están las personas consideradas como grandes dependientes que no vivan en residencias.
Según la asociación, son más de 300.000, aunque hay 32.000 que, según alertaron, no podrán ser inmunizadas porque se encuentran en la lista de espera para ser valoradas y categorizadas como dependientes.
“A estas personas se las deja al albur de que un médico o médica acredite enfermedades que requieran apoyos para la vida diaria, como si el personal de medicina estuviese especializado en valoración de la dependencia, además de darles una nueva actividad que sobrecargue aún más su trabajo y sature, más si cabe, los servicios sanitarios en plena pandemia”, señaló.
(SERVIMEDIA)
02 Feb 2021
GIC/gja