La Fadsp hizo estas consideraciones tras conocerse que la Cámara de Comercio de Barcelona ha propuesto reflexionar sobre la viabilidad o no de implantar el llamado copago sanitario.

Según recordó la citada federación, todos los estudios realizados sobre el impacto del copago señalan que es incapaz de reducir la frecuentación innecesaria de los servicios médicos.

Y, prosiguió, si alguna vez consigue disminuir el uso de las prestaciones médicas, merma también tanto la demanda necesaria, como la innecesaria, lo que produce un deterioro de la salud de la población.

También se sabe, añadió la Fadsp, que los copagos tienen efecto sobre todo en las personas con pocos recursos y con mayores problemas de salud, que "no acuden o retrasan las demandas de atención sanitaria incluso cuando son necesarias", lo que demuestra que se convierten en un "factor importante de inequidad" para la población.

Por eso, advirtió Defensa de la Sanidad Pública, "el asunto es aún mucho mas grave si se tiene en cuenta la situación actual de España", donde más de 4,5 millones de personas están en paro, las pensiones medias son de 870 euros y un 57% de los trabajadores con empleo perciben menos de 1.000 euros al mes.

En este contexto, avisó, la instauración de copagos "puede tener unos efectos devastadores" sobre el acceso a la atención sanitaria y sobre la salud de la ciudadanía.