Así lo recogió el manifiesto leído al final de la marcha, donde también se condenó la “condescendencia con cualquier forma de terrorismo y maltrato hacia los niños, las mujeres, los enfermos, los mayores y los débiles”.

Bajo el lema ”Sí a la vida”, los manifestantes defendieron la vida “en todas sus etapas, desde la concepción hasta la muerte natural”; pidieron a los medios de comunicación “difundir una imagen positiva de la maternidad y del embarazo”, e instaron a “todas y cada una de las fuerzas políticas asumir a un compromiso con la vida” en su programa electoral.

Asimismo, reclamaron políticas de apoyo a la maternidad y de ayuda a las mujeres embarazadas por parte de los poderes públicos, defendieron “el derecho de objeción de conciencia para aquellos profesionales contrarios al aborto y la eutanasia”; exigieron “una protección especial para los discapacitados, los mayores y los enfermos”, y expresaron su respaldo a las fuerzas de seguridad que combaten el terrorismo, los crímenes de sangre y los malos tratos”.

La marcha partió a las 12 de la mañana de la madrileña plaza de Cibeles y concluyó en la Puerta del Sol, donde se instaló un escenario, pantallas de televisión y sistemas de megafonía con música para acoger testimonios y amenizar el acto.

Con la presencia de pancartas, banderas y globos de colores (sobre todo blancos y azules), la manifestación contó con una amplia presencia de niños junto a sus padres y de familias extensas (también con abuelos).

“Sí a la vida”, “No al aborto”, “Déjame Vivir” o “Ni aborto del PSOE ni aborto del PP” Fueron algunos de los lemas que podían leerse en las pancartas.

Al acto acudieron el eurodiputado popular Jaime Mayor Oreja y representantes de las asociaciones convocantes, como el Foro de la Familia, Fundación Madrina, Fundación Red Madre, Médicos por la Vida, Fundación Síndrome de Down y Derecho a vivir.

Según la portavoz de esta última asociación, Gador Joya, “las leyes se aprueban y las leyes injustas se derogan”.

“Todos los españoles sabemos que leyes que contemplan el aborto como un derecho son injustas e inconstitucionales, y pueden y deben ser derogadas democráticamente”, agregó.

Al concluir la marcha se ofrecieron testimonios sobre temas alusivos a las reivindicaciones expuestas en la manifestación, como el de una oncóloga especializada en menores que pidió “responsabilidad a los profesionales”; el de un médico cubano encarcelado por defender los derechos humanos; el de un joven con síndrome de down, y el de una madre que, en su momento ,decidó no abortar pese “a sus circunstancias difíciles”.

Según los promotores, esta manifestación forma parte de los 78 actos con motivo del Día Internacional por la Vida que a lo largo de este fin de semana se celebran en 70 ciudades españolas y ocho capitales europeas y sudamericanas.