Así lo señaló el portavoz del Comité de Acción Política de Vox, Jorge Buxadé, quien compareció en rueda de prensa en la sede central de su partido en Madrid. “Nosotros lo tenemos muy claro, el señor Illa no debería ser ministro desde hace meses”, aseveró.

Buxadé instó a Illa a dejar “ya” de ser ministro, aunque a su juicio debería haber dimitido “desde la primera semana” en la que se advirtió que en el Gobierno “eran incapaces de gestionar adecuadamente” la crisis del coronavirus y la consiguiente crisis económica.

Tras cargar contra la “gestión criminal” del Ejecutivo, este dirigente de Vox deploró que el PSOE “vuelve a confundir el partido, el Gobierno y el Estado”, lo que supone “exactamente la definición de lo que es un Estado totalitario” al promover “la confusión del todo por la parte”.

En este sentido, afirmó que “por supuesto que todos los gastos” que realice Illa en calidad de candidato a la Generalitat deben ir a cargo del PSC. “Aunque desconocemos de dónde sacarán el dinero porque afiliados por supuesto que no tienen”, apostilló.

Buxadé aprovechó, asimismo, para reivindicar a Vox como “la única alternativa” frente al separatismo de cara a los comicios catalanes del próximo 14 de febrero. Es más, catalogó la suya como “la alternativa completa que ha venido y se va a quedar para siempre” frente a los “rutilantes” fichajes del PP.

“No esperen de nosotros ninguna huida, ningún retroceso, ningún chalaneo”, advirtió el portavoz del Comité de Acción Política de Vox, incidiendo en que su partido no piensa permitir que el Gobierno catalán “siga llamando al acoso a nuestros actos, afiliados, simpatizantes o candidatos”. “Anunciamos que si es posible poner una querella, pondremos cinco", dijo ante ese “acoso” por parte de “grupos separatistas y de extrema izquierda”.

Finalmente, señaló que no le sorprende la “falta de transparencia” con respecto a la vacunación en España y apuntó directamente a la responsabilidad del Gobierno nacional. Así las cosas, le exigió que garantice la vacuna a aquellos que quieran ponérsela y también “el derecho a no ser vacunados” a los que no lo desean por las razones que estimen.