Desde el Grupo Parlamentario de Vox se recuerda que la Mesa del Congreso aprobó, con el único voto en contra de VOX, que la Cámara Baja acogiera la tradicional cena solidaria del 24 de diciembre. En ella, parlamentarios “voluntarios” acompañarán a las personas necesitadas en una visita a la institución entregándoles, después, “una bolsa de comida y un termo”.

Tras recriminar que el Congreso ha dotado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de unos “poderes extraordinarios” que le han servido para “arruinar a comerciantes y hosteleros y llenar España de colas del hambre”, Vox denuncia que ahora la Cámara se convierte en un escenario mediático.

Vox considera que, en lugar de convertir el Congreso en un “intencionado photocall”, los organizadores deberían destinar “los recursos de esta acción a las muchas asociaciones que reparten alimentos desde hace meses, aliviando la ruina que ha provocado el Gobierno Sánchez en miles de familias”.

Vox considera que los actos de solidaridad o caridad deben practicarse de “forma discreta y preservando la dignidad de las personas que reciben la asistencia, algo incompatible con actos como el planteado por el Congreso”.