“Lo de ayer tuvo un valor simbólico de recuperación por parte de la democracia de un bien que es patrimonio nacional”, celebró el ministro en una entrevista con TVE recogida por Servimedia, después de que la Justicia entregara las llaves del pazo a la abogada general del Estado, Consuelo Castro Rey.

Sobre la recuperación de los bienes que alberga el pazo de Meirás, el ministro señaló que la familia del dictador Francisco Franco “tiene derecho a plantear sus cuestiones y se resolverán”, pero, a su juicio, “el contenido y el continente están bien atados”, por lo que “la voluntad del Gobierno es recuperar un bien que fue un expolio”.

Existe un inventario con cerca de 700 bienes entre obras, tapices, alfombras y otros artículos de valor. Según los medios gallegos, la firma del traspaso celebrada ayer se retrasó por la necesidad de revisar el inventario judicial de los bienes culturales y comprobar que la descendencia del dictador no se había llevado nada.

Sobre el futuro del pazo, que empleaba el dictador como residencia de vacaciones y que ya es público, el ministro auguró que “le daremos un sentido cultural”, aunque “lo pensaremos con tiempo”. No obstante, dijo que será un lugar “de memoria” y con “un sentido positivo”.

Este pazo que se asemeja a una construcción medieval fue ideado por la escritora gallega Emilia Pardo-Bazán y data de finales del siglo XIX, pero acabó en manos del dictador Francisco Franco, que le dio un uso de residencia de verano.

ARTISTAS

Sobre la protesta convocada para hoy por los colectivos de artistas y espectáculos para denunciar su situación con la crisis del coronavirus, Uribes reconoció que “los sectores culturales han sufrido mucho” y puso en valor los fondos europeos para cultura, que se cifran en 200 millones de euros.

Asimismo, dijo que en enero se creará la comisión interministerial para impulsar el Estatuto del Artista que, dijo, es un proyecto “de legislatura” y que, por tanto, hay que desarrollar con “tiempo” y “calma”.

Respecto a los conciertos y espectáculos musicales, recordó su petición a las comunidades autónomas para que las salas de conciertos se reconozcan como “salas de cultura” y no como ocio nocturno, lo que les permitiría retomar la actividad con las medidas de seguridad frente al coronavirus pertinentes.

En torno a los macroconciertos y festivales, el ministro no quiso augurar cuándo se volverán a celebrar, pero será “cuando tengamos la tranquilidad de que no va a haber contagios”, y esa “seguridad” la dan “las vacunas”.