Tras este gesto, diez militares y un científico subieron a bordo de una zodiac con rumbo al buque de investigación oceanográfica “Las Palmas”, según informó el Ejército de Tierra.

Con estas acciones, se puso fin a la XXIV Campaña Antártica del Ejército de Tierra, antes de que el duro e “inhóspito invierno antártico tome el relevo”.

Durante esta campaña se realizaron grandes mejoras en la infraestructura y en la maquinaria de la base; múltiples apoyos de movimientos, tanto por mar como a pie, para la toma de muestras y datos; se instaló un sistema de comunicaciones que ha facilitado enormemente el trabajo.

Este sistema les permitió estar más cerca de sus familiares, en el plano personal, y, en el profesional, divulgar su labor a una treintena de colegios, institutos, universidades y otras instituciones.

También cumplimentaron estrictamente el Sistema de Gestión Ambiental de la base, certificado conforme a la norma ISO 14001. La consecución de todos estos objetivos fue posible gracias a la seguridad que proporciona una cualificada y experimentada asistencia sanitaria y una planificación logística detallista y rigurosa.

Se dio el apoyo a once proyectos de investigación —9 españoles, 1 portugués y 1 chileno—. A lo largo de la campaña, 38 científicos han formado parte de la base y han trabajado obteniendo los datos y las muestras que requerían sus proyectos de investigación.