Esta es la principal conclusión de la 'Radiografía del Mercado del Alquiler 2019' realizada por Alquiler Seguro y donde analiza la evolución del alquiler en Álava, Alicante, Barcelona, La Coruña, Madrid, Málaga, Murcia, Sevilla, Valencia, Vizcaya y Zaragoza. La única provincia que sufrió una contracción del mercado fue Barcelona, con una disminución de la oferta de vivienda principal destinada al alquiler del 3,6%. En cambio, la vivienda no principal aumentó un 1%, unas dinámicas que, según el estudio, se repiten también en el resto de provincias catalanas.

Por otro lado, Murcia fue la provincia en la que más creció la oferta, con un incremento del número de viviendas destinadas a primeras residencias en alquiler del 8,25%. Le siguieron Alicante (+6,6%), Málaga (+5,7%) y Sevilla (+3,2%). Madrid, por su parte, registró un crecimiento del mercado del 2,8%.

En cuanto al resto de provincias, Vizcaya registró un aumento de la oferta en 2019 del 2,8%, Álava del 2,6%, La Coruña y Zaragoza del 2%, y Valencia del 1,7%.

Respecto a la tipología de vivienda destinada al alquiler, el estudio señala que la superficie media de los inmuebles es de unos 81 metros cuadrados, divididos en tres habitaciones y un cuarto de baño.

Las viviendas más pequeñas son las de Madrid y Álava, con 76 metros cuadrados de superficie media en ambas provincias, que se reparten en dos dormitorios y un baño en la capital; y tres dormitorios y baño en la provincia vasca.

ESTABILIZACIÓN DEL MERCADO

El estudio también recoge una estabilización del Índice de Mercado del Alquiler de Vivienda (IMAV) en casi todas las provincias estudiadas, que cerraron el año en torno al 1. Este indicador mide la presión del mercado a través de una división entre la demanda activa y la oferta. Cuanto más cercano sea al 1, más estables serán los precios, una circunstancia que no se da en Barcelona, donde se situó en el 0,84 al cierre de 2019.

“La Generalitat apuesta por el intervencionismo para la regulación de los precios del mercado, lo que genera incertidumbre y preocupación entre los propietarios, que optan por sacar del mercado sus viviendas o subir los precios”, diagnosticó el consejero delegado de Alquiler Seguro, Antonio Carroza. “Están consiguiendo justo lo contrario de lo que se busca y no solo eso, el mercado catalán empieza a mostrar síntomas de desaliento que de no corregirse podría convertirse en un derrumbamiento”, prosiguió.