Así lo anunciaron los representantes del banco luso, quienes aseguraron que esta promoción, bautizada como ‘Gran Depósito’, podrá contratarse con una inversión mínima de 500 euros, que puede ascender hasta los 50.000 euros. Estos fondos estarán garantizados por el Fondo de Garantía de Depósitos de Portugal.

“Teníamos que agradecerles a los españoles la confianza y la oportunidad que nos van a dar. La situación de tipos que vive Europa es bastante mala, pero hemos decidido adoptar esta posición para abrir la puerta a los inversores y permitirles probar nuestra aplicación”, aseguró el director general de BIG en España, Arturo Perera.

BIG también oferta en España depósitos trimestrales con intereses del 0,15% TAE, semestrales con intereses del 0,20% y anuales con 0,25% TAE. A diferencia de el 'Gran Depósito', el importe máximo que se puede invertir es 250.000 euros.

Además, el banco luso ofrecerá a sus clientes la posibilidad de acceder al mercado de inversión a través de dos plataformas: ‘Simple Trading’, para que los principiantes puedan acceder a operaciones sencillas como las de la bolsa española; y ‘Advanced Trading’, que ofrecerá los clientes más experimentados con el mundo de la inversión el acceso a los productos financieros más complejos.

Respecto a cómo la pandemia del coronavirus puede afectar a la llegada de BIG a España, el director general en España, Arturo Perera, señaló que, en esta “situación terrible y dolorosa”, la entidad portuguesa ha elegido “al caballo ganador”. “La era de las sucursales está llegando a su fin. Las personas están utilizando sus móviles como si fuesen sus oficinas”, añadió Perera.

En cuanto a su llegada a España, el presidente y fundador del banco luso, Carlos Rodrigues, aseguró era “un paso natural” para promover su estrategia de crecimiento del grupo y recalcó su interés por establecerse en el país. “Los que lideraban el sector bancario hace 30 años no son los mismos que ahora”, añadió.

El banco luso ha instalado sus oficinas en la cuarta planta del número 67 de la calle Serrano de Madrid, donde se situó la antigua sede del Banco Sabadell, y estará dirigido en España por Ana Gil y Peter Rodrigues, quienes ejercerán como directores ejecutivos. Por su parte, Antonio Preto acompañará a Arturo Parera en la dirección general.