En la comparecencia conjunta que prestó en Moncloa con el presidente, Pedro Sánchez, para presentar las líneas básicas de los Presupuestos Generales del Estado 2021, Iglesias proclamó que con estas cuentas públicas “inauguramos una nueva época en la política económica española”, que “deja atrás drásticamente la etapa neoliberal y de recortes” y “pone a nuestra patria en la senda” que ya recorre la UE con su nueva política de ayudas a los países afectados por el coronavirus. Aseguró que los Presupuestos refuerzan los servicios públicos, la transición ecológica y las “transformaciones económicas” ya antes necesarias pero ahora “absolutamente inaplazables”.

Según ensalzó, el anteproyecto va a suponer “un refuerzo histórico de la sanidad pública, la investigación y el desarrollo” y dedicará 6.000 millones a la transición ecológica y las energías renovables además de “multitud de elementos para hacer progresar a España”.

Como ejemplos, puso un refuerzo de la atención a la dependencia con un 46% más de aportación del Estado, 600 millones; que se dedicarán 700 millones de los fondos europeos a atención a los mayores, “transitando del modelo de residencias al de la atención domiciliaria”; que se dedicarán 200 millones a la educación de 0 a 3 años, otros 300 a igualar el permiso de maternidad y paternidad de 16 semanas y 200 más a apoyar la conciliación con cuidadores profesionales “como primer paso para construir un sistema de cuidados”.

También mencionó el incremento en 5 puntos del Iprem al que se referencian muchas ayudas y prestaciones públicas, una inversión de 2.000 millones adicionales en las políticas activas de empleo y de 200 para modernizar los servicios sociales, y que se dedicarán otros 250 a becas universitarias.

Para el final dejó los dos acuerdos a los que llegaron ‘in extremis’ anoche el PSOE y Unidas Podemos. Por un lado, la mejora del ingreso mínimo vital, respecto al que reconoció que “ha habido cosas que no hemos hecho bien” por dejar a muchos perceptores fuera y haberse creado un cuello de botella en la tramitación.

En concreto, que de forma permanente se podrá solicitar el IMV teniendo en cuenta los ingresos del año en curso y no los del anterior, para cubrir a los que han perdido muchos en esta crisis, y que los jóvenes sólo tendrán que acreditar dos años de vida independiente y no tres para solicitarlo.

Respecto a la ley de vivienda con plazo máximo de cuatro meses para llevarla al Congreso, justificó que la emergencia del coronavirus “nos obliga a acelerar la intervención”, y presumió de que España será el estado europeo con más intervención pública en el mercado de la vivienda.

Iglesias concluyó con un llamamiento explícito a los grupos de la mayoría de la investidura para que aprueben los Presupuestos: “Habrá que trabajar muchísimo pero existe una mayoría parlamentaria plural que está llamada a transformar nuestra patria en un sentido progresista”